Ecoturismo en México: Arrecifes Coralinos 1
Ma. del Consuelo Carranza y Simón.
Investigadora del Área de Ciencias Exactas y Naturales
Posgrado e Investigación
UNIVERSIDAD LA SALLE
e-mail: ccarran@ci.ulsa.mx
Recibido: Julio de 2002. Aceptado: Agosto de 2002.
Los bosques de coral petrificado trenzan sus brazos de cobre debajo de la noche de agua. Entre las estatuas sin ojos aparecen erizos de piel ígnea:
son las gotas de sangre
que sangra el sol seco desde lo alto.
Maite Villalobos.
INTRODUCCIÓN
La Comisión de Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo (1985) –Reporte Brun- dtland–, se propuso elaborar nuevas formas de evaluar y medir el
progreso dirigido hacia un desarrollo sostenible,2 mismo que, años más tarde, retomaron los participantes a la Confe- rencia de Río (1992) –Agenda 21.
El término “desarrollo sostenible” modificó la concepción de turismo tradicional –depredador de recur- sos–, por el de un turismo de respeto que per-
mitiera retomar la simbiosis hombre–turis- mo–naturaleza. Esta modalidad turística busca el desarrollo sostenible, cuyo fin es restaurar, recuperar y
preservar el entorno que es objeto de visita. El turismo de naturaleza o ecoturismo es la alternativa que permite convivir con la naturaleza de forma
responsable y respetuosa, tomando en cuenta tres requisitos:
a) Contribuir a la conservación local,
1 Trabajo presentado en el VI Congreso Interamericano sobre Medio Ambiente, en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, del 29 de septiembre al 1 de octubre
de 1999.
2 Desarrollo sostenible es aquél desarrollo que satisface las necesidades del presente sin comprometer la habidad de las futuras generaciones para
satisfacer sus propias necesidades" (Reporte Brundtland).
b)
Incluir la participación comunitaria significati- va y
c) Ser rentable y autosuficiente.
A)
Una visión general sobre el ecoturismo en México.
La diversidad biológica, la variedad de eco- sistemas y la riqueza arqueológica de México representan una gama de opciones para el desarrollo del
ecoturismo en nuestro país. A través de la Ley General del Equilibrio Ecológi- co y Protección del Ambiente (LEGEEPA), se creó el Sistema Nacional de
Áreas Naturales Protegidas (SINAP), que tiene como objetivo armonizar los imperativos ecológicos con el desarrollo económico y social de México, de
acuerdo con los patrones de sustentabilidad. Actualmente, el SINAP cuenta con 127 Áreas Naturales Protegidas (ANP).
Esta riqueza brinda al viajero la posibilidad de elegir desde bellas sabanas, bosques tropi- cales, de coníferas, oyameles y manglares, hasta el
avistamiento de ballenas, santuarios de mariposas monarca o buceo en las aguas claras y cálidas del Caribe mexicano para admi- rar las caprichosas
formas creadas por la natu- raleza en los arrecifes de coral. Todo este patri- monio natural y cultural con el que cuenta Méxi-
co debe aprovecharse, por un lado, para favore- cer la sustentabilidad y, por el otro, en beneficio del desarrollo económico local, regional y nacional
de nuestro país.
B)
Una visión general sobre los corales (clasifi- cación científica).
Los corales –cuyo nombre científico es Col- pophyllia natans3– se consideraron plantas has- ta el siglo XVIII,4
siendo en realidad pequeños animales llamados pólipos, que al nacer pre- sentan formas medusoides y, al llegar a la edad adulta, se fijan a un sustrato
y cambian de aspecto.
Los filones construidos por colonias de algas calcáreas, y no corales, se desarrollaron hace dos mil años, aproximadamente a mediados de la última era
precámbrica; en la paleozoica, los corales, las esponjas y las algas calcáreas hi- cieron crecer sus comunidades; y, durante la mesozoica, los corales
duros se convirtieron en constructores predominantes. Sin embargo, al final de esta era desapareció un gran número de las familias coralinas, y en el
período ter- ciario las especies de corales conformaron los filones, presentando similitudes con la especies actuales.
Boca
Base de Pólipo
3 SEDESOL, Áreas Naturales Protegidas de México, Méxi- co, p. 439, 1993.
4 Según la información con la que se cuenta fue hasta 1722 que el naturalista Peysonnel cambió la visión en las investigaciones. Hasta entonces se
consideraba al coral como un arbusto marino blando que al contacto con el aire cambiaba de textura y se endurecía. Se pensaba que esta planta sufría
una mutación y se convertía en un mineral rojizo. www.marenostrum.org. Texto de Joseph
Pólipo completo de coral
Tentáculos
de pólipos
Los pólipos se componen de epidermis y gas- trodermis, la capa del no-tejido fino que se encuentra entre éstos es el mesoglea. Cada coral secreta
sustancias calcáreas que confor- ma un duro esqueleto externo. Se dividen en dos tipos: perfore e imperforate; los primeros son los corales que tienen
esqueletos porosos con las conexiones entre los pólipos, a través del esqueleto, y los imperforate, que son los de esqueletos sólidos.
El nombre de coral se le da a los miembros de una amplia clase de invertebrados marinos, pero de manera general se puede decir que se trata de pólipos
que al reunirse forman las lla- madas colonias de coral. Algunas especies de corales establecen una relación celular con cier- tas algas, con las que
viven simbióticamente,5 aprovechando los desechos metabólicos de és- tas, con el objeto de desarrollar sus propias funciones. A este esqueleto
productivo es al que se denomina coral, mismo que se subdivide en dos subclases, según las diferencias que pre- senta su simetría radial.
La clase Anthozoa se divide en tres subcla- ses: la primera subclase –Octocorallia–, el pó- lipo cuenta con ocho tentáculos de
ramificación lateral o brazos, en los Octacorllians se incluyen las gorgonias (abanicos de mar), los corales de tubo de órgano y los corales
suaves, formando colonias. Los miembros de la otra subclase
–Zoantharia–, raramente se ramifican lateral- mente. Estos pólipos se caracterizan porque tienen tentáculos en múltiplos de seis, entre los
Ma. Dacosta, 26 de abril de 1999. 5 Es la asociación en beneficio mutuo.
que están los corales negros y los corales de Filón–edificio, que también se conocen como “corales duros” o “corales pedregosos”, y el coral de piedra;
los Zoantharians, pueden desarrollarse solitarios o en colonias. Los cora- les desarrollan muy diversas formas de creci- miento, como son:
La Octocorallians, tiene ocho tentáculos
La Zooantharians ,cuenta con tentáculos múltiplos de seis
I. Colonias.
Las colonias tienen su origen en la unión de pólipos solitarios; estas colonias tienen un diámetro que va desde uno a tres mm, y se conectan
lateralmente por medio de tubos que son una extensión de las cavidades gastrovas- culares de los pólipos. Los corales se repro- ducen sexual y
asexualmente, un pólipo puede hacer uso de estas dos formas durante el trans- curso de vida. Su reproducción sexual es por fertilización interna o
externa, los huevos fertili- zados son empollados por el pólipo, que des- pués se convierten en larvas de la libre–na- tación. Al colocarse la larva en
un sustrato se convierte en pólipo.
Reproducción de Corales
La construcción en la que viven los pólipos son los depósitos de sus predecesores, de modo que las distintas construcciones dependen de la especie de
que se trate.
II. Arrecifes Coralinos.
Se encuentran en la parte relativamente superfi- cial del suelo marino. Se constituyen por una acumulación en forma de roca de esqueletos de calcio de
animales coralinos, como el alga roja y otros. Los arrecifes crecen de uno a 20 cm por año y son tropicales, se extienden cerca de 30° al norte y al
sur del ecuador y habitan única- mente en las aguas no menores a los 20°C (68°F); es decir, en aguas tropicales tibias.6
Los arrecifes no se encuentran en aguas pro- fundas sino en las cercanas a la superficie mari- na, de manera que la luz les penetre fácilmente. La
causa de lo anterior radica en que en los arrecifes viven las algas simbióticas llamadas zooxanthellas sin las que los corales no son capaces
de sobrevivir; éstas requieren de luz para hacer su fotosíntesis. Entre las funciones principales de las zooxanthellas está la de pro-
porcionar el carbón a los corales, con el que incrementa su energía. Ya satisfechas las necesidades de carbón, sólo les queda recibir el nitrógeno y el
fósforo que requieren estos ani- males, elementos que absorberán a través de la
comida.7
Arrecifal de Coral
8
6 “Coral”, Microsoft Encarta 98 Encyclopedia, Microsoft Cor- poration, 1993–1997.
7 Nybakken W. Janes & Webster K. Steven, “Life in the Ocean”, Scientific American, vol 9, núm. 3, Nueva York, USA, pp. 72-87, 1998.
8 Http://www.unicamp.br/fea/ortega/eco/esp/esp-10b.htm
La dependencia que tienen los corales de las algas varía dependiendo de las especies y de su localización. Los esqueletos coralinos son la base de los
arrecifes, junto con los corales hydrozoas, las algas proveedoras de calcio, los moluscos y las esponjas.
a)
Formas de Vida.
Se tuvo durante mucho tiempo la creencia que los corales se desarrollaban en el fondo de los mares tropicales y que las siguientes genera- ciones
habían crecido encima de los esqueletos muertos del carbonato de calcio. Los arrecifes de coral son ecosistemas con estructuras de- finidas,
compuestas, en una de sus partes, por plantas fotosintéticas, entre las que están las zooxanthellas, y algunos consumidores. La otra parte de
los arrecifes consiste en pólipos vivien- tes.
Alrededor de los pólipos hay un esqueleto de calcio que contiene filamentos de algas verdes, sin embargo, no es esta clase de alga la única que
cohabita con los corales, hay otra, por e- jemplo, que crece en la superficie de los viejos depósitos esqueléticos. Esa alga y otras plantas semejantes
se convierten en los productores primarios (de la cadena alimenticia).
Las zooxanthellas fotosintéticas y los fila- mentos de alga verde proveen de alimento energético a los pólipos coralinos. Los animales
coralinos sólo se alimentan por la noche, y lo hacen de plancton –zooplancton–, al cual cap- turan con sus tentáculos o brazos; sin embargo,
es importante precisar que los animales corali- nos no hacen presa al plancton por las calorías que contiene sino por la cantidad de nutrientes que les
aporta, fósforo especialmente.9
Por medio de la digestión, los corales liberan estos nutrientes que llegan a las algas. El ciclo del coral y las algas consiste en el intercambio de
nutrientes, mismos que no podrían obtener- se del agua. Se considera que el 90% del total de la fotosíntesis y del aporte de oxígeno a la atmósfera se
realiza en los océanos. El primer eslabón de la gran cadena alimenticia del mundo acuático es el fitoplancton.
En el ecosistema se encuentran peces her- bívoros como el colorado pez mariposa, el golfi- llo de mar, el pepino del mar, y las estrellas, así como
numerosas especies de moluscos que se alimentan de algas. Escondidos en las cuevas, detrás de los arrecifes y sobre las rocas, se pue- den hallar
diversos animales y tiburones. Las burbujas salen de los arrecifes, millones de peces nadan en grupos de día sobre las mura- llas de calcio y de noche
duermen en su interior, entre estos animales están los pterocaesiotile. Los numerosos micro habitantes y la productivi- dad del arrecife
soportan una gran diversidad de vida marina que hace de los arrecifes corali- nos una manifestación ecológica muy atractiva para cualquier ser
humano.10 Al morir los cora- les, los esqueletos de piedra calcárea son inva- didos por algas no simbióticas de vida.
Ecosistema de arrecifes de coral M.O. partícu- las de materia orgánica en el agua
11
b)
Clases de arrecifes.
De acuerdo con la teoría de Charles Darwin, los arrecifes coralinos son de tres tipos: el filón de franja –orla–, de barrera y de atolón. Los de franja
se extienden hacia la superficie de la ori- lla de la playa de una isla o de tierra firme; se encuentran comúnmente en las islas del Pacífi- co Sur,
las islas hawaianas y en partes del Ca- ribe. Los de barrera están más lejos de la orilla, con un canal o un lago entre el arrecife y la ori- lla,
pueden admirarse en el Caribe y en la zona Indo–Pacífico, como es el caso del gran filón de la barrera australiana norteña, catalogado como el filón
más grande del mundo con una exten- sión de 2 mil kilómetros. Los de atolón son islas coralinas, normalmente consisten en un arrecife estrecho con
forma de herradura, en el centro
del cual se encuentra una laguna poco profun- da, el atolón más grande es el Kwajalein, que rodea una laguna y mide noventa y siete kiló- metros de
largo.
Tipos de Filones
De Franja De barrera De atolón
c)
Sistemas arrecifales más importantes del Mundo
El mayor sistema arrecifal a nivel mundial es la Gran Barrera Arrecifal, localizada en la costa oriental de Australia y los arrecifes aledaños del
sudeste asiático, tanto por su tamaño como por su riqueza de especies. El segundo en impor- tancia se ubica frente a las costas de Belice, junto con
los arrecifes de Quintana Roo, Méxi- co, Guatemala, y Honduras. El del Mar Rojo, aunque es uno de los más visitados, no es com- parable a los
anteriores ni por su tamaño ni por su estado de conservación.12
Zonas Arrecifales del planeta
d)
Arrecifes del Caribe Occidental
El Sistema Arrecifal del Caribe Occidental se encuentra a lo largo de las costas de México, Belice, Guatemala y Honduras. Su extensión es de
aproximadamente mil kilómetros y está con- formado por una gran variedad de ecosistemas. La porción mexicana es de tipo bordeante; en la parte norte
hay arrecifes relativamente someros que van desde Cancún hasta Punta Marona y,
finalmente, un importante desarrollo arrecifal profundo desde Puerto Aventura hasta la fron- tera con Belice.13
La costa occidental de Cozumel presenta a- rrecifes profundos, mientras en la oriental se encuentran porciones con macizos y canales. Al final está el
Banco Chinchorro, que es una plataforma arrecifal de forma ovalada que cuen- ta con un importante desarrollo y una gran diversidad de ambientes.
En Belice los ecosistemas arrecifales son considerados únicos en el hemisferio occidental por su tamaño y variedad, así como por el desa- rrollo de los
corales en condiciones prístinas.
Entre las características geofísicas que pre- sentan, se encuentra la conformación de un a- rrecife de barrera casi continuo en el borde de la
plataforma y un complejo laberinto de par- ches arrecifales sobre una laguna arrecifal amplia y relativamente profunda.
En la costa norte, cerca de la frontera con México, en el Cayo Ambergris, y al sur entre Placentia y Punta Icacos, se encuentran los a- rrecifes
bordeantes de Belice. Además, se pre- sentan tres plataformas arrecifales: Turneffe Island, Lighthouse Reef y Glovers Reef.
El desarrollo arrecifal en Guatemala está limi- tado por la influencia fluvial que ejercen los ríos Motagua y Dulce sobre la Bahía de Amatique, por lo
que los arrecifes presentan un menor grado de desarrollo y su distribución es más aislada en comparación con el resto de la zona. Sin embargo, estos
son de gran interés científi- co por ser representativos de comunidades co- ralinas viviendo bajo presiones ecológicas naturales14.
En Honduras los arrecifes se dividen, por su ubicación, en dos grupos: los localizados en las islas de la Bahía, donde hay arrecifes de plata- forma,
bordeantes y de parche; y los de las islas de la Mosquitia, donde se hallan arrecifes bor- deantes y de parches. Ambos grupos presentan una gran
diversidad tanto en las zonas someras como en las profundas, contando con porciones de canales y macizos de gran belleza.
12 INE, “Conservación y uso de los arrecifes en México”,
Gaceta Ecológica
, núm. 42, p.33.
13 Idem. p. 33.
14 Op.cit., Conserva.
e)
Arrecifes Mexicanos
Los casi diez mil kilómetros de litoral de nuestro país son bañados por aguas que presentan di- ferentes características, y que han permitido la gran
diversidad de ecosistemas, flora y fauna marina. México cuenta con grandes formacio- nes arrecifales, como las que van desde el sur del Caribe
mexicano, donde forman parte del sistema arrecifal beliceño, y que de manera dis- continua llegan hasta Yucatán, a la plataforma continental de
Campeche y frente a Veracruz. En el Golfo de México existen 30 formaciones arrecifales, las más importantes son: la Blan- quilla, Isla de Lobos y de
Enmedio, en la zona de Tampico-Tuxpan; la Gallega, la Galleguilla, Anegada de Adentro, Isla Verde, Sacrificio y Pájaros, en Veracruz; Chopas, Enmedio,
Ane- gada de Afuera, Cabezo y Rizo; en la Platafor- ma de Campeche; Arcas, Obispo, Triángulos, Banco Nuevo, Banco Inglés, Arenas y Alacrán, además de
los arrecifales caribeños.15 Al sur de la Península de Baja California, entre La Paz y Cabo San Lucas, se encuentra Cabo Pulmo, arrecife considerado
como el más norteño de todo el Pacífico Oriental.
La gran diversidad de corales formadores de arrecife, de acuerdo con la información de los investigadores Horta–Puga y Carricart–Gavinet, es de 63
especies, 46 de las cuales viven en el Atlántico y 17 en el Pacífico. México cuenta con once áreas naturales arrecifales protegidas:
Ø Parque Nacional Sistema Arrecifal Veracruzano: se localiza en el estado de Vera- cruz –en los municipios de Veracruz, Boca del Río y
Alvarado–, su superficie es de 52,239 ha. Este sistema arrecifal está formado por 17 arre- cifes, 11 de los cuales se encuentran frente a Antón Lizardo
y los seis restantes enfrente del Puerto de Veracruz. Al noroeste se unen con el Sistema Arrecifal Veracruzano Norte –cuya ubi- cación es enfrente de
la Laguna de Tamiahua–, y al este con el Sistema Arrecifal de Campeche y Yucatán.
La importancia de este sistema radica tanto en su tamaño, como en el número de especies que en él habitan. Entre las que se encuentran peces de mil
formas y colores, esponjas, erizos,
estrellas, además de barreras de coral de fuego, cuernos de alce y arroz, conglomerados, redondos de coral, de cerebro y estrella, entre otros. Está
formado por bajos, islas y arrecifes que se localizan en la parte interna de la plataforma continental del Golfo de México, ele- vándose desde
profundidades cercanas a los
40 m. Presenta diferencias en las zonas ex- puestas al movimiento del oleaje y las zonas protegidas. Se decretó Parque Nacional en 1992.
Amenazas:
deterioro por la sobreexplotación del coral dada la importancia económica que representa para los pobladores de las zonas costeras los corales y las
conchas; así como la contaminación y la pesca mecanizada.
Ø Parque Nacional Arrecifal Alacranes: se localiza en el estado de Yucatán, a 130 km de la costa del Municipio de Progreso. Su
superficie total es de 333,768 ha, y la zona de núcleo es de 31,669 ha. Lo constituyen cinco islas llamadas: Pérez, Chico, Lagarta, Deserto- ra y
Desterrada. La vegetación que se encuen- tra en estas islas es de dunas costeras. Cuenta con 24 especies de corales pétreos, localizados en la barrera,
la laguna central y la costa occi- dental. Este atolón es el más norteño en el banco de Campeche, la forma de las islas que lo conforman es cambiante
debido a las tor- mentas y las variaciones de dirección del vien- to. En 1994 fue decretado Parque Nacional.
Amenazas:
explotación pesquera inmodera- da, turismo no regulado, contaminación prove- niente del lavado con detergentes tóxicos en los tanques de los buques,
además de la contami- nación por el petróleo.
Coral
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Ø Parque Nacional Cabo Pulmo: Se encuentra frente al municipio de Los Cabos, al sureste del estado de Baja California Sur, con una
superficie de 7,111ha. Este arrecife es el único que se localiza en las aguas del Pacífico Este, sus formaciones coralinas representan un tipo de
hábitat cuyas características ecológicas son importantes si se toma en cuenta su alta productividad biológica. En el fondo se localiza parte de una
terraza marina que viene de tiem- pos geológicos, considerándosele uno de los arrecifes más antiguos del Pacífico americano, de acuerdo con restos
paleontológicos encon- trados recientemente.
En él viven una maravillosa fauna marina, como son los peces plateados, las mantarrayas y peces multicolores. Sin embargo el crecimien- to de los
arrecifes es más lento ya que éstas son aguas menos cálidas que las del Caribe. Se decretó Parque Nacional en 1995.
Amenazas:
existe una presión adversa sobre los recursos del arrecife por las actividades que se desarrollan en la zona, por ejemplo, la pesca comercial y
deportiva, el buceo deportivo y el turismo en general, la sobreexplotación de los recursos naturales -flora y fauna- y el aumento de la población en el
área.
Ø Parque Nacional Isla Mujeres, Punta Cancún y Punta Nizuc: está en el estado de Quintana Roo –en los municipios de Isla Muje- res y
Benito Juárez–, su superficie es de 8,673.06 ha. Se localiza en tres polígonos: a) Costa Occidental de Isla Mujeres: 2,795 ha. b) Punta Cancún: 3,301
ha., y c) Punta Nizuc: 2,576 ha. Las formaciones coralinas más impor- tantes son: Los Cuevos, Cuevas de Don Miguel, Chitales, El Túnel, La Bandera, La
Iglesia, Pun- ta Cancún y Punta Nizuc. En las cercanas a Isla Mujeres están: Los Manchones y El Garrafón. Los parches coralinos se desarrollan a
profundi- dades entre los cinco y 12 m, en lo que se ha llamado barrera arrrecifal interior. En las aguas más profundas –entre 20 y 25 m– existen for-
maciones de gran tamaño, donde pueden admi- rarse peces de diversos colores, corales cere- bro, estrella, cuerno de alce, lechuga y más de 30 especies
coralinas. En este parque marino la
encuentran tres pequeños islotes en donde se tiene el único registro en el país de dos especies de golondrina de mar ( Anous minutus y A. stolidus), que anidan en ellos. Fue decreta- do Parque Nacional en 1996.
Amenazas:
actividades turísticas no contro- ladas, acciones en las operaciones de embarcaciones, pesca fortuita, contaminación del agua por aceites, aguas
jabonosas y des- perdicios, por construcciones al margen de la regulación establecida, además de las presio- nes sociales por la continua demanda de
nuevos permisos para realizar actividades den- tro del Parque, etc.
Cresta arrecifal
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Ø Parque Nacional Arrecifes de Cozumel: Se localiza en el estado caribeño de Quintana Roo –en los municipios de Cozumel y Quintana
Roo– frente a las costas del estado. Alberga las formaciones arrecifales más impor- tantes del Caribe mexicano, mismas que fueron reconocidas como las
más bellas del mundo. Sus ecosistemas son: arrecifes coralinos, pasti- zales marinos, camas de algas, manglares, du- nas costera, playas arenosas,
playas rocosas, etc. Su superficie es de 11,988 ha. Su fauna es principalmente acuática, en él se hallan repre- sentados casi todos los grupos
faunísticos, volviéndose un área de reservorio tanto de especies de flora, como de fauna marina. Algu- na de las especies que alberga se encuentran en
peligro de extinción o amenazadas, por lo que están sujetas a protección. En sus aguas transparentes y poco profundas viven esponjas rojas, cafés,
amarillas y estrellas de mar, así
superficie terrestre es muy pequeña, ya que constituye únicamente el islote llamado “La Car-
bonera” en Isla Mujeres y, en Punta Cancún, se
17
Autor: Javier de la Maza Contreras
como conglomerados de coral de fuego, de ce- rebro, de lechuga y cuerno de ciervo.
Amenazas:
Degradación de las estructuras coralinas, reducción de la biodiversidad, sobre- explotación pesquera, contaminación del agua y pérdida de hábitat
originada por la elevada afluencia turística, la falta de educación ambien- tal, el crecimiento irracional de la infraestructura turística y la falta
de la aplicación de la norma- tividad y en el desmedido crecimiento de presta- dores de servicios. Dos puntos fundamentales son: la falta de educación
ambiental y de los mecanismos que regulen las actividades. En particular, el acelerado desarrollo de la infra- estructura turística y urbana a lo largo
de la costa, combinado con el escaso cumplimiento a la normatividad ambiental existente, representa actualmente la mayor fuente potencial de de-
terioro para los ecosistemas arrecifales y para el entorno natural en general.
Reserva de la Biosfera Banco Chinchorro:
Se localiza en el estado de Quintana Roo, –en el municipio de Othón P. Blanco–, contando con una superficie de 144,360 ha. Los corales for- man un
cordón arrecifal que conforma la estruc- tura morfológica. La composición de las espe- cies coralinas se encuentra representada por haxacorales,
octacorales e hidrozoarios que ha- cen un total de 93 especies, así como por la gran diversidad de tipos de corales, de gorgo- náceos e hidrozoarios. A
diferencia de los otros arrecifes mexicanos, éste no se desarrolla sobre la plataforma continental o insular, sino sobre una profunda cresta submarina.
Es el arrecife más grande y presenta múltiples forma- ciones coralinas muy desarrolladas, constitu- yendo un sistema arrecifal en sí mismo. Es una de
las zonas más productivas por la explotación de especies de alto valor económico. Esta Reserva fue reconocida por la UNESCO, previo análisis de la
UICN18 y la aprobación de la Ofi- cina del Consejo Internacional de Coordinación del Programa MAB-UNESCO.
Amenazas:
Principalmente la pesca ilegal de caracol rosado, las actividades turísticas no reguladas y el emblanquecimiento de corales, lo que modifica el
entorno.
18 Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
Ø Parque Nacional Isla Contoy: Se ubica en el estado de Quintana Roo –en el municipio de Isla Mujeres–, en el extremo poniente del
canal de Yucatán, siendo su límite el Golfo de México y el Mar Caribe. Sus ecosis- temas son: manglares, selva baja caducifolia y dunas costeras. La
ausencia de agua dulce en la isla reduce el número de especies terrestres. Se considera el principal refugio de aves del Caribe mexicano. Alberga una
de las colonias más relevantes de la costa atlántica de nuestro país, en ella se encuentra el pelicano café, anidan las tortugas marinas carey, la
caguama y blanca. La flora marina es diversa y abundante, especialmente en Ixlache, arrecife que forma parte del Gran Arrecife Mesoamericano, –se-
gundo en importancia en el mundo.
Amenazas:
Incumplimiento de las normas en el Parque, inadecuada disposición de residuos sólidos, pesca prohibida, violación al reglamen- to respecto a las
actividades de anclaje de embarcaciones, uso de snorkel, etc. Se decretó Parque Nacional en 1998.
Ø Reserva de la Biosfera Arrecifes de Sian Ka’an: se localiza en el estado de Quin- tana Roo –en el litoral del estado, en los munici-
pios de Carrillo Puerto y Solidaridad–, cuenta con una superficie de 528,147 ha. Sus ecosis- temas: bosque tropical caducifolio, bosque tro- pical
subperennifolio, vegetación acuática, sub- acuática y dunas. En la barrera se encuentran 60 especies de corales.
Forma parte del segundo más largo del mun- do, en esta reserva existen diversos ambientes marinos representativos de las costas del esta- do. Esta
Reserva fue reconocida por la UNESCO, previo análisis de la UICN19 y la a- probación del Bureau del Consejo Internacional de Coordinación del Programa
MAB-UNESCO.
Ø Parque Nacional Arrecife de Puerto Morelos: Ubicado en el estado de Quintana Roo, se decretó área natural protegida, con el objeto
de preservar las especies de coral, peces, moluscos, crustáceos y otros organis- mos marinos. Forma parte del Gran Arrecife Mesoamericano. Se localiza
en la Costa Caribe del municipio de Benito Juárez. En la laguna
19 Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
arrecifal se desarrollan pastos marinos que re- tienen sedimentos, lo que evita la erosión de la costa y disminuye la fuerza del oleaje. En esta laguna
y en el área arrecifal viven numerosas especies de peces, invertebrados y plantas, algunas de las que se encuentran amenazadas o sujetas a protección
especial. Se decretó Par- que Nacional en 1998.20
Se estima que en corto tiempo y siguiendo la política ambiental actual se sumarán a las ante- riores tres Áreas Naturales más, con lo queda- rán
protegidas prácticamente todos los siste- mas arrecifales más importantes de nuestro país.
Ø Parque Nacional Arrecifes de Xcalak.
Ø Parque Nacional Arrecifes de Puerto Aven- tura–Tulum y Punta Maroma
Ø Parque Nacional Arrecifes del Banco de Campeche.21
Turismo
ecológico en los arrecifes coralinos.
La importancia del turismo se puede valorar en todo el mundo, ya que es una fuente principal de ingresos para muchos países. El ecoturismo, en cierto
sentido, busca continuar con estos beneficios además de exaltar el cuidado del medio ambiente. Como se puede concluir, el provecho que ofrece esta
modalidad turística es en favor de la humanidad entera y no se limita a las generaciones presentes.
Según los datos otorgados por SEMARNAP, el turismo contribuyó con el 11% del producto bruto mundial en el año de 1995.22 Es un tanto difícil determinar
cuánto fue el ingreso económi- co del ecoturismo, principalmente porque es una empresa nueva y porque en muchas oca- siones se realiza de manera
individual. Sin embargo, se ha calculado que la tasa de creci- miento del ecoturismo es cercana al 20% anual, con lo que en pocos años se comenzarán a
notar sus resultados en el producto interno bruto de cada país.
20 Toda la información sobre Áreas Naturales Protegidas se obtuvo de:Http://www.ine.gob.mx/unacnp/listan
21 INE, "Conservación y Uso Sustentable de los Arrecifes en México", México, pp. 24-25.
22 Ibidem, p. 30.
Los arrecifes, como ya se anticipó al inicio de este trabajo, cuentan con un gran potencial eco- turístico, ya que su belleza y su poca explo- ración
funcionan como ganchos para miles de turistas de naturaleza. Y si a lo anterior se suma que las playas son uno de los destinos más visi- tados, se
concluye que con organización, nor- matividad y servicios necesarios, los arrecifes coralinos pueden estar fácilmente al alcance de todo visitante.
Corales
23
México, como ya se estudió, es un país que alberga a lo largo de su territorio litoral inmen- sas formaciones coralinas que son materia del ecoturismo.
Uno de los casos es el de Cozumel, en donde cerca del 70%24 de los turistas tienen como principal atracción el buceo en el Parque Marino.
Según la SEMARNAP, los objetivos primor- diales del ecoturismo radican en valorar los ser- vicios ambientales, entre los que están:
La biodiversidad como patrimonio aprecia- ble de la población.
Servicios escénicos y paisajísticos.
Hábitat de especies carismáticas.
Información biológica, cultural, evolutiva y ecológica.
Calidad y valor agregado a los productos turísticos.
Elementos y oportunidades de recreación.
23 http://www.aquadec.net/spanish/austral/aust10.htm
24 Autor.Claudio Contreras Koob.
El ecoturismo tiene muchas ventajas, ya que plantea la concientización y acercamiento con el medio ambiente, el cuidado y protección de los
ecosistemas; además de contribuir con el crecimiento económico de las naciones y de im- plicar una forma de uso con bajos costos de o- portunidad.
Entre otras de sus ventajas está también la generación de empleos en la po- blación local, que por convertirse en un centro turístico, incluye sueldos
bien remunerados.
A diferencia del turismo convencional, el eco- turismo, por la naturaleza de lo que abarca, no está sujeto a modelos de actividades que limiten su
ejercicio, ya que sus espacios terri- toriales son mayores; sus vías de realización, variadas y, favorablemente, sus necesidades económicas, menores.
El ecoturismo no puede verse como un desa- rrollo fragmentado e independiente en cada Á- rea Natural Protegida donde se lleva a cabo, si- no como un
todo complementario que lleva a la nación entera hacia el perfeccionamiento eco- lógico y ambiental. Ello implica establecer políti- cas ambientales
eficaces a escala nacional que, a la vez, se sumen a las internacionales.
Para la implantación de una política ambien- tal concerniente a esta modalidad turística se requiere el establecimiento de reglamentos y zonificación,
así como de medios de evaluación del impacto ambiental, procesos de interacción aplicables a los lugares de visita e infraestruc- tura.
Con la construcción de las Áreas Naturales Protegidas se instauran los mecanismos de concurrencia entre los diferentes órdenes del gobierno, el sector
privado y la población local, de manera que los beneficios del ecoturismo en el ANP no se cierran a un ámbito de la so- ciedad. Los resultados se
mostraron rápida- mente y el crecimiento ha sido muy favorable en comparación al tiempo transcurrido, hecho que nos lleva a un futuro esperanzador.
El número sobresaliente de Áreas Naturales Arrecifales con que cuenta México, hace de vi-
natural, que estará protegido por la legislación, por los turistas y por los nativos.
Peligros que corren los corales:
La belleza natural que nos ofrecen los corales está en constante peligro por la ruptura incons- ciente que logra la mano del hombre. Es por tanto
necesario evaluar con frecuencia el desa- rrollo de las actividades que se realicen en la ANP, así como la aplicación de los programas de manejo y
demás reglamentaciones.
Entre los principales peligros está la contami- nación de agua, el calentamiento de las misma y el choque de las embarcaciones. El último de los
problemas se presenta constantemente de- bido a la inconsciencia e irresponsabilidad de los barcos pesqueros. Como fue el caso de un barco camaronero
que este año quedó varado por una falla mecánica y dañó mil 57 metros del Parque Nacional de Islas Mujeres.
En marzo de 1998 se multó a Norwegian Cruise Lines por destrozar mil 500 m. cuadra- dos del Gran Arrecife Maya, el segundo más grande de todo el
mundo.25 Muchos otros da- ños se podrían mencionar, pero baste con los dichos.
1.
La decoloración de los corales:
Los arrecifes coralinos recientemente fueron afectados por la decoloración o emblanqueci- miento, que implica la pérdida de los animales simbióticos
llamados zooxanthellas. En 1979 y 1980 distintos incidentes causaron el emblan- quecimiento de los arrecifes cercanos a Oki- nawa, de la isla
del este, del noreste de Austra- lia y del mar Caribe. Pero una pérdida mayor se dio en 1982 y 1983 en los arrecifes del este de África, Indonesia y la
costa oeste de América Central y Suramérica.
Los sucesos de emblanquecimiento más dañinos y terribles ocurrieron durante un perio- do de tres años, de 1986 a 1988, en áreas de
Taiwán, Hawai, Fiji, isla Mayotte y el largo y magnífico sistema arrecifal de la Barrera. La causa de estos hechos es, en gran medida, desconocida. Los
principales acercamientos lle- van a la contaminación, al calentamiento global y a la radiación ultravioleta como posibles orígenes, sin embargo no se
tiene total seguri- dad de que sea alguna de ellas.26
Las más recientes investigaciones indican que la causa debe ser el inusual calentamiento de las aguas. La temperatura óptima para el crecimiento de los
corales se encuentra entre los 26 y los 27°C, de manera que temperaturas cercanas a los 29°C causan estrés en los co- rales y aumentan la velocidad en
la fotosíntesis del zooxanthellas, creando grandes concentra- ciones de toxinas libres en el tejido de los corales. Parece que estos pólipos y
corales es- tresados pueden expulsar a las zooxanthellas, dando lugar al emblanquecimiento.
Los corales decolorados son difícilmente re- generados, un arrecife toma varios años para recuperarse y, subsecuentemente, la repara- ción total se
convierte en algo imposible. Sin las zooxathellas, los corales están imposibilitados para tener su depósito, es decir, su esqueleto de carbonato de
calcio, mismo que hace posible la fundación de un arrecife coralino. No sólo los corales sino todos los organismos coralinos pueden potencialmente
perder su hábitat, debido a incidentes de decoloración, de la misma manera en que el esqueleto de carbona- to de calcio está expuesto a la erosión o
corro- sión del arrecife.
Coral Tabla
Corales
27
2.
Principales peligros que corren los corales cuando se ejercita el buceo:
O El uso de lancha y el anclaje sobre ellos.
O El hecho de que al entrar al mar, o para descansar, se llegan a pisar los corales causádoles daños.
O La pesca en los arrecifes, que puede provocar la muerte de los peces al atorarse las redes.
O La extracción de objetos del arrecife, tanto vivos como muertos, con lo cual se afecta el curso natural del hábitat, en el que los
corales muertos sirven de alojamiento para los animales vivos.
O El acercamiento a los corales vivos es menor al metro de distancia, así como cuando se tocan, sin saber que la menor presión puede causar su muerte.
O El acercamiento de las motos para agua a una distancia menor a los 50 m. del arrecife.
La belleza de los corales es comparable a su fragilidad, ya que cualquier tipo de alteración del medio provoca una ruptura de difícil o im- posible
regeneración. La simple turbulencia de las aguas, la sobrepesca, la sedimentación
–procedente de la deforestación y de las gran- jas–, son actos que durante muchos años no fueron legislados para la protección de los eco- sistemas,
cuando han sido las fuentes princi- pales de los daños a corales.
E) Programas Mexicanos de Protección.
En los últimos años el gobierno mexicano ha desarrollado una serie de programas preven- tivos para proteger a los arrecifes coralinos de todos los
peligros a los que están expuestos. Uno de los más grandes logros se dio en junio de 1997, cuando el Presidente Constitucional de los Estados Unidos
Mexicanos, Dr. Ernesto Zedillo Ponce de León, se reunió con los presi- dentes de la República de Guatemala, de la República de Honduras y con el Primer
Ministro de Belice para presentar una iniciativa que pro- tegiera a los masivos arrecifes coralinos que cada uno de estos países tiene. Evento en el
que se suscribió la Declaración Conjunta de Tulum.28
1. Marco Institucional y Jurídico.
La Secretaría de Medio Ambiente, Recurso Naturales y Pesca (SEMARNAP),
desde su creación (1994) estableció una estructura coordinadora que ha permitido la integración, planeación, gestión y manejo de los recursos
naturales, de forma coherente con los proce- sos de transición de los medios de produc- ción, tomando siempre en cuenta los costos ambientales.
El Instituto Nacional de Ecología (INE) es la organización responsable de la planeación, manejo, aprovechamiento,
conservación, pre- servación y restauración de los recursos y ecositemas marinos.
La Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO) es el organismo que
coordina las políticas nacio- nales para la conservación de la biodiversidad biológica.
El Instituto Nacional de Pesca (INP), es el encargado de la investigación sobre los recur- sos,
preservación y conservación de especies acuáticas bajo la protección especial de su hábitat.
La Secretaría de Marina
vigila, protege y res- guarda la Zona Económica Exclusiva.
La Secretaría de Comunicaciones y Trans- portes se encarga de regular y administrar las
actividades realizadas en los puertos, el re- gistro de embarcaciones y el tráfico marino en cualquier modalidad.
Las secretarías de Turismo y de Desarrollo Social se encargan de planificar y regular el
desarrollo de las actividades en centros turís- ticos y urbanos de las zonas costeras.29
El marco jurídico, respecto a los diferentes aspectos de los mares y los recursos naturales, se encuentra sustentado en el artículo 27 de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. El instrumento central de la gestión ambiental en México es la Ley General del Equilibrio
Ecológico y la Protección al Ambiente (LEGEEPA), expedida en 1988 y reformada en 1996. En esta ley se integraron temas como: conservación de la
biodiversidad, delitos am- bientales, ordenamiento ecológico y lo relacio- nado con los recursos naturales. Es importante comentar que diversas leyes
inciden en la regu- lación del aprovechamiento de los recursos marinos y costeros, como son: la de Pesca, la Forestal, la de Aguas Nacionales, la de
Bienes Nacionales y la Federal del Mar, entre otras. De la LEGEEPA emanan las Normas Oficiales Mexicanas (NOM), que son el instrumento de política
ambiental con el que se protege al medio marino y a sus recursos.
La NOM–059–ECOL contempla lo relativo a las especies terrestres y marinas sujetas a algu- na modalidad de protección especial y regula su preservación.
De las 41 especies de mamíferos marinos reportados en México, 14 se incluyen en esta norma, así como diez especies de reptiles marinos, 23 especies de
peces y 32 especies de invertebrados.
Existen otras 46 NOM que regulan el manejo de actividades pesqueras o extractivas y contro- lan los procesos de transformación, importación y pesca
deportiva, así como el aprovechamiento y la conservación de los recursos pesqueros, la sanidad acuícola y los productos de la pesca. En estas normas
también se busca la regu- lación y fomento sanitario industrial; sin dejar de lado lo relacionado con la seguridad, higiene y medio ambiente laboral.
Además, hay normas vinculadas indirectamente con los medios mari- nos, dirigidas a moderar los efectos adversos derivados de los aprovechamientos
forestales sobre flora y fauna silvestre, suelos y cuerpos de agua.30
Otro instrumento jurídico que apoya la orde- nación de estas zonas son los Estudios o Mani- festaciones de Impacto Ambiental.
2. Programas de Manejo Integrado.
Entre los esfuerzos del Gobierno Mexicano por preservar, cuidar y proteger la vida marina se halla el Manejo Integrado de Áreas Costeras y Marinas, que
incluye los siguientes programas:
Ordenamiento Ecológico en Zonas Costeras.
Ordenamiento Ecológico Marino.
Manejo Integral de Zonas Costeras.
A través de estos tres programas se busca salvaguardar las zonas costeras que presentan un importante crecimiento económico, turístico y de
acuacultura, al igual que establecer los li- neamientos y previsiones a los que deberá suje- tarse la preservación, restauración, protección y
aprovechamiento sustentable de los recursos naturales existentes en las zonas marinas y costeras. El objetivo de estos programas es el
de ser un principio precautorio en el manejo de los ecosistemas, de los recursos y de cualquier proceso hidrológico.
Los erizos (strongilocentrotus franciscanus) son importantes depredadores de algas que ayudan a mantener el equilibrio en los arrecifes coralinos
31
El coral ha sido utilizado a lo largo de la histo- ria para la fabricación de medicinas, como com- plemento nutritivo y como fuente de variados
platillos culinarios. También ha sido objeto de inspiración de artistas contemporáneos y an- tiguos. Por citar uno de los casos, pueden men- cionarse
los versos que Ovidio dedicó a los corales, en los que sostiene que son plantas suaves que, al sacarse del mar, se endurecen.
CONCLUSIONES
La opción ecoturística abre al hombre en este milenio, la posibilidad de acercarse a los luga- res poco explorados de su gran casa, es decir del
planeta. Además de hacerlo consciente de la responsabilidad que tiene con lo que es más indefenso que él.
El establecimiento de las diferentes normas ha sido un gran paso, sin embargo son per- fectibles, éste ha sido sólo el inicio en el camino de la
planificación del hombre. El despropor- cionado crecimiento poblacional implica un ma- yor número de recursos y de servicios para abastecer las
necesidades de los consumido- res; problema en el que el ecoturismo tiene una doble función:
a) Concientizar a más individuos sobre la importancia del cuidado del medio ambiente.
b) Establecer nuevos programas turísticos correspondientes a la demanda.
30 Ibidem.
31 Autor. claudio Contreras Koob.
El microcosmos de los arrecifes coralinos otorga al mundo una belleza incomparable, de- cenas de colores brillantes en las pieles de los peces, cuevas
de innumerables salidas y crus- táceos de distintas especies. Y aunque la exis- tencia de un arrecife puede considerarse un privilegio para el país que
lo hospeda, es mayor el privilegio de aquella nación que se compro- meta a protegerlos de cualquier daño y los muestre a propios y foráneos con toda la
luz que poseen.
Las políticas ambientales de cada país, en referencia a los arrecifes coralinos, tienen mati- ces distintos, pero comparten la base sobre la que se
edifican. Así, a modo de corolario, se agrega que los principios de manejo de los arrecifes deben inclinarse a:
Delimitar el número de visitantes según la conveniencia con el medio.
Conservar los ecosistemas inalterados y no afectar la estructura de los mismos.
Ubicar, ordenar y legislar cualquier tipo de actividad que se realiza cerca de las zonas, ya sea turística, comercial o pesquera.
Establecer proyectos de restauración y recu- peración ecológica para las zonas dañadas.
Reglamentar la construcción de áreas re- creativas.
Ofrecer los adecuados servicios turísticos con fines de promoción y organización.
Buscar nuevas vías para obtener ingresos que financien la conservación, restauración y vigilancia de los ecosistemas.
Evitar la producción de sedimentos en cualquiera de los casos que los afecten.
Sólo si se consideran estos objetivos podrá iniciarse una regla en la que se respete el medio ambiente y se logren los fines de los hombres. Y sólo
cuando queden instauradas estas bases de cuidado, el ser humano podrá contemplar, con la sensibilidad de un niño, la formación de piedra que se genera
en el mar y, tal vez, volver a ver en ella la cabeza de medusa, como lo hi- cieron los antiguos.