Revista del Centro de Investigación de la Unviersidad La Salle
Vol. 12, No. 48, julio-diciembre 2017, pp. 121-158
DOI: http://dx.doi.org/10.26457/recein.v12i48.1486

Experiencias pedagógicas significativas de educación rural en Colombia, Brasil y México*

Significant pedagogical experiences of rural education in Colombia, Brazil and Mexico

Blanca Rosa Ávila1

1Universidad de la Salle Bogotá (Colombia)

Correspondance author: blancarosaa083@gmail.com

Received: 11 de julio de 2017 | Accepted: 27 de octubre de 2017 | Published: 28 de febrero de 2018 |

* Este artículo presenta los resultados de investigación de la tesis doctoral titulada “Experiencias Pedagógicas significativas en educación rural en Brasil, México y Colombia” del Doctorado en Educación y sociedad de la Universidad de la Salle, Bogotá, Colombia.
Copyright © 2017 "Blanca Rosa Ávila" This is an open access article distributed under the Creative Commons Attribution License, which permits unrestricted use, distribution, and reproduction in any medium, provided the original work is properly cited.

Abstract

This article presents an investigation results “The pedagogical experiences in Colombia, Brasil and México”; it starts with an analysis of that has been educative politics in rural contexts of this tree countries, emerging and alternating perspectives are presented as pedagogical strategies of the four significant pedagogical experiences, as a result of a comparative study, are identified and analyzed in each one of the territories its educational actions such as: collective construction of curricula, educational practices and contextualized methodological strategies, transformation of practices and knowledge in the community family environment, realities and practices in function of the educational quality and finally a reflexive balance about the conception of educational quality in the rural environment.

Keywords: Pedagogy, significant experiences, community, rural education

Resumen

Este artículo presenta el resultado de la investigación “Experiencias Pedagógicas Significativas en educación rural en Brasil, México y Colombia”. Inicia con un análisis de lo que ha sido la política educativa rural y las perspectivas emergentes y de alternancia en este campo, como estrategias pedagógicas de las cuatro experiencias pedagógicas significativas, como resultado de un estudio comparativo, se identifican y analizan en cada uno de los territorios su accionar educativo tales como: construcción colectiva de currículos, prácticas educativas y estrategias metodológicas contextualizadas, transformación de prácticas y saberes en el entorno familiar comunitario, realidades y prácticas en función de la calidad educativa y finalmente se hace un balance reflexivo sobre la concepción de la calidad educativa en el entorno rural.

Palabras clave: Pedagogía; experiencias significativas; comunidad; educación rural

Introducción

Entender la calidad educativa desde las experiencias significativas de educación rural, es reflexionar acerca de los elementos que permiten reconocer los territorios y comunidades que las habitan, identificar sus valores, sus representaciones y sus narrativas; reconociendo la escuela como un espacio impulsor de saberes para la vida, desde lo cotidiano. De igual forma, es necesario acercar las realidades en momentos, espacios y contenidos que permitan generar conocimientos, habilidades y actitudes, que enseñan a valorar lo que se tiene y a la vez proteger lo que se habita, para “que dignifique al estudiante, al campesino, al indígena y al habitante rural como ser humano” (Arias G.2014: p.81).

El presente artículo aborda algunos rasgos característicos de las acciones educativas generadas desde las experiencias pedagógicas significativas desarrolladas en el contexto rural en Colombia, Brasil y México, las cuales han cambiado paradigmas y enriquecido saberes comunitarios en el entorno rural. Después de analizar el problema de inequidad, difícil acceso a la educación, bajos resultados e informes sobre porcentajes de la población que ocupa el territorio rural, sus actividades económicas y proyectos de vida, en estos tres países, se realiza la investigación, un análisis comparativo con enfoque cualitativo tipo descriptivo sobre la calidad de la educación rural de cuatro experiencias pedagógicas significativas de educación básica, media y profesional, haciendo uso de la técnica de recolección de la información del modelo etnográfico con preguntas y guías semiestructuradas, evaluación de experiencias personales y registro de historias de vida, mediante la interacción e introspección con los grupos en cada una de las experiencias, elementos fundamentales para el proceso de descripción, interpretación y análisis de la información y datos recolectados (Rodríguez, 2010).

La construcción de las categorías se realizó tomando los temas más destacados en cada una de las experiencias y desde los cuales se hizo la triangulación con los conceptos referenciados teóricamente.

Estudios relacionados con educación rural en estos tres países, dan cuenta del avance de la política educativa en cuanto a organización de procesos de gestión y administración - referente general de lo que está sucediendo en gran parte del continente latinoamericano con la educación rural, disgregada y adaptada a la política educativa urbana, en algunos casos más difíciles que otros. Esta investigación se convierte en una expectativa para la acción educativa en las comunidades de los territorios rurales, cuyo liderazgo y desarrollo son un referente testimonial y ejemplo a seguir, “alternativas curriculares que consideran la diferencia como una oportunidad para el aprendizaje” (Pihno, 2008, P.3).

A continuación, se relacionan importantes hallazgos de investigaciones que se han realizado sobre la calidad de la educación en América Latina, las concepciones y factores que influyen en ella. En los estudios relacionados con calidad de educación rural, se evidencia la preocupación por las necesidades que aquejan las comunidades de este sector y en especial lo relacionado con la falta de una política pública educativa que garantice la equidad y la justicia social.

El tema de calidad es de consideración en cuanto a la equidad y el número de personas que accede ella. Según Turbay (2005) la situación de la educación media excluye a dos terceras partes de la juventud colombiana, da cuenta comprehensiva de las inequidades en materia de acceso, permanencia y logro para jóvenes de quintiles de ingresos inferiores, campesinos y habitantes de zonas apartadas. Vinculados a este tema y su incidencia en los resultados de los desempeños obtenidos por los estudiantes, se encuentran los factores asociados al proceso educativo. García y otros (2013) explican cómo el sistema educativo separa a las personas por razones de clase: los estudiantes no solo están separados, sino que tienen acceso a una educación desigual, por tanto, los malos resultados se concentran en los estudiantes de las familias pobres, que son la gran mayoría, mientras que los estudiantes de clase alta, obtienen resultados buenos, como si vivieran en un país diferente. Algo similar muestra Duarte et al. (2012), haciendo referencia a estos resultados, sobre lo cual manifiesta que en Colombia existen altas desigualdades en los resultados académicos de los estudiantes, asociadas al nivel socioeconómico de sus familias, al tipo de gestión y zona geográfica de las escuelas a las que asisten.

Otros de los factores asociados a la calidad de la educación son las características socio-económicas, desde lo cual Burgos (2011) demuestra que estas características en el hogar son relevantes y señala una enorme brecha educativa entre la población rural y urbana. Variables como los años de educación promedio del núcleo del hogar, el nivel de riqueza del hogar (ingreso per cápita del resto de los miembros del hogar) y la presencia del cónyuge, influyen de manera positiva en la acumulación del capital humano de las personas, medido como un mayor número de años de educación.

Barrera, Maldonado & Rodríguez (2012) mostraron que en los últimos años han mejorado las tasas de cobertura, sin que se haya dado aumento en la calidad educativa, debido a que los aumentos de inclusión cobijaban estudiantes de poblaciones vulnerables (p.32). Es de señalar que existen una serie de factores que evidencian problemas asociados a la desigualdad de condiciones, sumado a las características de cada territorio donde las condiciones sociales, políticas y culturales se relacionan directamente con el cumplimiento de las políticas educativas y limitan la efectividad de las mismas, convirtiéndose en oportunidad para unos pocos

Con respecto a la calidad de la educación en el territorio rural, las investigaciones realizadas presentan una mirada alternativa en este entorno, como un espacio diferenciado, desde el cual defienden la posibilidad de hablar de una educación rural incluyente y en mejores condiciones. El CINEP (2002) definió una Propuesta de Política Pública Agraria para Colombia, para el sector rural, en ella proponían que la educación rural debía tener un sentido funcional en conocimientos, horarios y aplicaciones.

Es importante destacar una experiencia en “la formación diferenciada en las escuelas rurales de Venezuela” (2004), cuyo objetivo fue construir la dinámica de los saberes campesinos tachirenses del cual se destacan reflexiones como: ¿Se han estudiado los procesos cotidianos mediante los cuales aprenden los grupos campesinos? ¿Cuál es el modelo de desarrollo endógeno compatible con las culturas rurales? ¿Cómo enseñar desde una racionalidad económica a las culturas campesinas con racionalidad holística? ¿Cuál es el valor otorgado por el profesional moderno a los saberes locales? Con estas reflexiones se cuestionan la relación entre educación, el modelo de desarrollo y la compatibilidad cultural de los grupos humanos, particularmente de los campesinos.

Históricamente la situación de los campesinos no ha sido gratificante y esto ha marcado una trayectoria en la aplicación de políticas y en consecuencia en el desarrollo de los pueblos. Esto lo demuestra Jaramillo (2004) en un análisis de la educación y el desarrollo rural en Colombia experiencia de la Federación Nacional de Cafeteros, con particular referencia al caso Caldas, donde concluye señalando que a través de los años se ha relacionado el sector rural con la explotación agrícola y a los campesinos se les ha visto como personas pobres y poco educadas. En México, Ezpeleta J. & Weis E. (1996) demuestran cómo las políticas educativas antes que mirar la contextualización, están orientadas al control burocrático y corporativo, entre lo que señalan: la gestión escolar en zonas rurales de extrema pobreza, las expectativas de escolaridad de las comunidades, la precariedad institucional de las escuelas, las políticas innovadoras.

Encontramos investigaciones que se han realizado sobre Experiencias pedagógicas significativas de educación rural, en las cuales se nota una constante preocupación por el mejoramiento de la calidad de la educación, para lo cual proponen: adecuar los contenidos, los métodos de enseñanza y la adaptación curricular, las metodologías, el cronograma de actividades académicas para que no haya interferencia entre las labores académica con las labores del campo. El trabajo desarrollado en departamento del Valle del Cauca, bajo la dirección de Quinceno (2013), titulado “Estrategias y propuestas de Educación y Pedagogía Rural”, hace importantes aportes a la educación en el debate actual sobre el desarrollo rural y basado en criterios de prioridad, racionalidad, equidad, solidaridad, desarrollo sostenible, de transparencia administrativa y de buen gobierno. El Comité de Cafeteros de Caldas (1996) concluye sobre la experiencia de “Escuela y Café” como un trabajo exitoso, ya que se han encontrado modificaciones en los hogares, diálogos familiares en torno al tema del café, notándose una verdadera integración familiar y en cuanto a los docentes participantes, los instrumentos y las estrategias pedagógicas les han permitido orientar un aprendizaje transversal y significativo.

En lo relacionado con la experiencia pedagógica de los Centros de Formación por Alternancia CEFA, Puig, P. (2006) encuentra que esta pedagogía es capaz de responder adecuadamente a las necesidades de las familias y del entorno local, además le permite a los estudiantes desarrollar numerosas actividades relacionadas con su medio. El trabajo se presenta como una alternativa para familias y comunidades que desean desarrollar su proyecto de vida en el contexto rural, puesto que la formación que reciben los estudiantes y sus familias está encaminada a formar líderes emprendedores en ese contexto.

Estudios relacionados con el Movimiento de los Trabajadores Rurales sin Tierra del Brasil, Stubrin (2007) analiza ocho casos de experiencias escolares que tienen lugar en los asentamientos y campamentos de la Reforma Agraria y uno de los pilares básicos del movimiento, la lucha por el “Derecho a la educación en América Latina”, identifica elementos relevantes entre movimientos sociales y el Estado que han incidido en la política pública de educación destinadas a la educación en el sector rural de Brasil.

En relación con estudios de interculturalidad, López, L. (1999), pone en manifiesto la incidencia de la educación en la población indígena en las zonas rurales, puesto que el sistema educativo se preocupó por uniformar a la población en el aspecto lingüístico cultural, lo que facilitó la exclusión de un número considerable de pobladores y la reducción de oportunidades de mejoramiento de la calidad de vida.

Según estas investigaciones no se puede generalizar el concepto de calidad educativa, puesto que ésta, varía de acuerdo con las mismas condiciones, los saberes, la cultura, los intereses, diferente a lo que plantean los indicadores para medir la efectividad de las políticas o programas educativos, si se encuentran inequidades en los estudiantes del sector urbano, que decir de la población rural, donde las condiciones de vida son aún más difíciles. A partir de los rastreos a experiencias pedagógicas desarrolladas en territorios rurales, la calidad educativa se evidencia de una forma diferente a los resultados obtenidos en unas pruebas estandarizadas, allí son importantes elementos como: desarrollo de currículos diferentes con metodologías y modelos de educación flexibles, resultados que tienen un alto porcentaje de efectividad en la inclusión y desarrollo local en las regiones donde se desarrollan. Entre los alcances de las experiencias se destacan mejores condiciones de vida para los territorios, disminución de la emigración, aumento de la generación de ingresos en la familia, impacto positivo en el bienestar familiar (hábitos alimenticios, mejoras en vivienda, convivencia).

La política pública educativa y lo rural

Al realizar un análisis de la política de educación rural en México, Brasil y Colombia, es notable un leve mejoramiento en cuanto a la cobertura, pero las condiciones indispensables en la enseñanza, hacen que un amplio número de niños del sector rural sigan excluidos del sistema educativo. Se cuestionan las ofertas educativas y los alcances de las mismas en el sector rural, si adicionalmente se sabe que los programas educativos o planes curriculares, emanados desde los ministerios, para educación básica y media han sido los mismos de lo urbano, dejando de lado la pertinencia de éstos y por consiguiente la baja cobertura en las regiones apartadas o de difícil acceso.

Esta situación aún es más complicada en educación superior, donde las pocas ofertas educativas para los jóvenes, no tienen una amplia cobertura en territorios rurales, las oportunidades de formación sin tener que desplazarse a otros lugares son mínimas, situación que reduce la posibilidad de trabajar un proyecto en el que el campo sea una oportunidad de vida

El discurso sobre calidad educativa en cada una de las naciones cuestiona las políticas y programas que se han desarrollado, sin embargo, es bien sabido que sin diferenciar elementos, factores y contextos, entre otros que influyen en este concepto o como mencionara (Martínez, B. (2015), hace parte del discurso para atender las demandas de los mercados. La medida de la calidad de la educación a través de indicadores, permite conocer lo incidencia de las políticas y los programas en el entorno educativo siendo referente motivador para mejorar, índices, según el requerimiento de las políticas públicas educativas.

Esta política vigilante, no atiende en su totalidad las condiciones en que se desarrollan estos procesos formativos y que, sin embargo, cuentan en el momento de medir calidad educativa. Los resultados obtenidos en las pruebas internacionales como PISA, o las que se aplican en cada uno de los países, miden requerimientos para índices de calidad establecidos, excluyendo en los estudiantes inteligencias (Garner, 1993) y otros saberes fundamentales para el diario vivir.

En el contexto rural el tema de la calidad educativa confluye con una serie de acontecimientos, en los cuales están involucrados todos los componentes que han hecho posible la construcción de proyectos en las regiones. La construcción de currículos contextualizados, la acción educativa en las comunidades, las prácticas educativas, las realidades vividas en cada comunidad, son acciones y estrategias que buscan “construir nuevas formas de participación y democracia” (Torres, 2017, p. 5), factor decisivo en el concepto de calidad en el contexto rural.

Experiencias Pedagógicas significativas

Una experiencia significativa se relaciona con una práctica concreta, un programa o proyecto, originada en el entorno educativo, con el objetivo de desarrollar las competencias de los estudiantes con metodologías dinámicas y lograr así un aprendizaje significativo, que genere un impacto saludable en la calidad de vida de la comunidad. La Experiencia Pedagógica Significativa, su práctica, es concreta en actividades y se sitúa en un espacio y tiempo determinados, bajo unos principios de organización interna como metodologías, acciones, participantes, entre otros, y cuyos integrantes buscan mecanismos para evidenciar los objetivos y logros alcanzados.

Calvache, H. et.al. (2016) denomina una experiencia pedagógica significativa no es una manera diferente de dar clase o alcanzar logros o metas, sino que incluye prácticas innovadoras con alto impacto en la calidad de vida de todos los miembros de la comunidad educativa (p.23). Las experiencias pedagógicas significativas que se abordan a continuación, se han realizado en un contexto determinado en el territorio rural, caracterizándose por concretar acuerdos, negociaciones y acciones de participación con sus comunidades, para el desarrollo de las mismas.

Experiencia Pedagógica Significativa de “Escuela y Café” en Colombia

Esta experiencia que se ha venido desarrollando ene desarrollando en las instituciones educativas rurales del Departamento de Caldas en Colombia, promueve la igualdad equitativa de oportunidades para las comunidades rurales con un currículo de carácter inclusivo y participativo, en el que integra la metodología Escuela Nueva, e incorpora los intereses comunitarios de cada una de las Instituciones de la región. La participación comunitaria en la construcción curricular, ha facilitado la incorporación de temáticas y horizontes considerando las condiciones de vida de los habitantes de la región, y la proyección formativa de niños y jóvenes en conocimientos técnicos sobre el cultivo y comercialización del café.

La experiencia cuenta con vinculación permanente de los padres de familia, quienes reconocen las habilidades que los jóvenes adquieren en el proceso, el cual inicia desde el grado sexto hasta el grado noveno de educación básica secundaria. En los grados décimo y undécimo, los estudiantes reciben las orientaciones para consolidar una empresa y desenvolverse en el negocio y cultivo de café como primera opción o en su defecto, emprender una idea en cualquier línea del agro.

Estas ideas se han consolidado en proyectos para el sector rural, muchos de ellos optan por la opción educativa que les ofrece la Universidad en el Campo, homologación de temas y profundización técnica o profesional, siguiendo la misma metodología. Con el propósito de formar la generación de relevo con conocimientos técnicos de la caficultura, los jóvenes rurales los hijos de los actuales productores de café se preparan para desempeñarse exitosamente en la actividad cafetera.

Por medio de proyectos desarrollados por los estudiantes y supervisados por técnicos o profesionales, se ha proyectado la formación en cada una de las siete normas de competencia, propuestas por la mesa sectorial de Café, conducente a la titulación en la competencia laboral, certificada como “Producción de café con criterios de rentabilidad, Calidad y Sostenibilidad de los Recursos”.

La Experiencia Pedagógica de la Pedagogía de Alternancia en Colombia

Esta experiencia desarrolla en Medellín, Machetá y El tambo Cauca, con formación académica a partir del grado sexto de educación básica, mediante el uso de instrumentos metodológicos que guían una educación integral del estudiante en lugares diferentes. Con el uso de guías de investigación o estudios, les permite cuestionarse sobre la problemática de su entorno, los quehaceres cotidianos y proyectar la solución de manera colaborativa y mancomunada.

Esta experiencia se ha convertido en una propuesta esperanzadora y pertinente, especialmente en los lugares en los que los pobladores han vivido situaciones de desplazamiento, exclusión social y escasas oportunidades de empleo. El objetivo de intervención es proporcionar a los jóvenes del medio rural una formación general integral fundamentada en cuatro pilares: la formación integral, el desarrollo local, metodología pedagógica pertinente y la asociación responsable.

La articulación armónica de la vida familiar y laboral ha servido para tecnificar e incentivar el trabajo de mujeres cabeza de familia y jóvenes del sector rural. Está direccionada por formadores profesionales que brindan orientación no sólo al estudiante sino a las familias que resultan involucradas en el proceso con visitas programadas a los hogares en periodos de trabajo comunitario o trabajo práctico.

La experiencia ha tenido incidencia en la comunidad con la optimización de recursos y la formación integral en valores. Con el desarrollo de proyectos, no sólo el estudiante recibe orientación, también las familias que resultan involucradas en el proceso, muchos de ellos han realizado proyectos productivos para sus familias, garantizando seguridad alimentaria y aumento de sus ingresos familiares en modelos equitativos de economía campesina.

La Experiencia Pedagógica de la Pedagogía de Alternancia en Colombia

Esta experiencia pedagógica significativa se basa en la pedagogía de Paulo Freire, y algunas ideas de los movimientos sociales, cuya finalidad constituye prácticas de educación pública, destinadas a niños, jóvenes y adultos; hijos de trabajadores rurales que habitan en las áreas de asentamientos y campamentos, conquistadas por el movimiento. Los procesos de enseñanza – aprendizaje inician con los cursos de enseñanza fundamental y tres años de enseñanza media, cuyo enfoque educativo no se aparta de la dinámica del movimiento social: lucha por la escuela pública de buena calidad para las comunidades del MST, el desarrollo del currículo aplicado a la situación real, con miras a que los conocimientos ayuden a resolver los problemas y situaciones del entorno.

La formación de esta propuesta tiene dos fundamentos: el trabajo y la militancia, se articula la formación para el trabajo del sujeto sin tierra, en el medio rural y la formación militante, uno de los pilares centrales en la construcción del Movimiento. La pedagógica la constituye la relación entre la escuela, la producción y el vínculo entre educación y trabajo colectivo, se ha destacado por lograr incorporar elementos de educación rural a la política pública de educación, con el propósito de conocer la realidad y transformarla. Según Vasconcelos (2001), siguiendo la educación liberadora desde los conocimientos, las actitudes, y las acciones, las personas adquieren la capacidad de reflexionar, comprender y actuar sobre su medio, transformando y construyendo las condiciones necesarias para la vida.

Esta experiencia, además de partir de las necesidades de los alumnos y sus comunidades convirtiéndolas en objeto de enseñanza, se ha destacado porque al interior del grupo se han generado propuestas educativas interesantes para asegurar el derecho a la educación de acuerdo con los requerimientos del contexto. Además de los principios filosóficos y políticos del movimiento, también promueven el respeto por la tierra, la producción, el trabajo cooperativo y la lucha por la transformación social, es una propuesta que ha generado puntos de reflexión sobre el qué y el para qué enseñar (Stubrin, F. 2011).

La metodología del movimiento considera la necesidad de unión tierra-educación, a partir de las preguntas: “¿cómo hacer la escuela que queremos?” Y “¿qué queremos de las escuelas de los asentamientos?”. Según Caldart, R. (2003) el objetivo principal es proporcionar el aprendizaje de un saber hacer y de un saber ser, enfocado en la práctica, desde las ideas de la pedagogía dialógica.

Centro de Estudios para el Desarrollo Rural CESDER en México

Esta experiencia pedagógica significativa tiene lugar en la zona de Ixtacamaxtitlán en la región de Zautla, Estado de Puebla México funciona con una estructura flexible para la calificación de técnicos y profesionales en promoción del desarrollo, en el manejo de procesos productivos agropecuarios, para responder a las necesidades de personas de extrema pobreza. Sus acciones están relacionadas con el cuidado de la naturaleza, el aprovechamiento de los recursos de la zona, el arraigo de la población en su comunidad y finalmente el logro de una “vida buena”, con los cuales impulsa proyectos de desarrollo sostenible a partir de acciones colectivas, promovidas en organizaciones locales comunitarias.

El interés se centra en formar al joven como sujeto social, fundamentado en la teoría de Foucault sobre el cuidado de sí y los fundamentos de la educación popular a partir de Freire, el empoderamiento para lograr la libertad de opinión y ser escuchado, planear actividades y participar en la búsqueda de soluciones a las necesidades comunitarias, fortalecer la capacidad grupal y el trabajo en torno a proyectos colectivos. A través de un trabajo semi-escolarizado, los jóvenes se forman y hacen extensivos sus conocimientos a las comunidades, en la región o en una organización en la cual debe realizar un trabajo social.

Según lo que manifiestan los jóvenes estudiantes ser Sujeto Social implica: poseer habilidades y principios, herramientas necesarias y en alternancia formación y práctica para medir las capacidades, en el desarrollo de los proyectos y en su autorreflexión y gestión. Desde la concepción del fundador de este centro, Benjamín Berlanga la construcción del sujeto social está relacionada con tres temas: dignidad, identidad y autonomía. El trabajo consiste en ayudarles a recuperar su dignidad, muchas veces pisoteada, como campesinos, como indígenas (Huerta, Serrano & Comunidad 2008, p.141). Producto de esta formación, existen varios grupos comunitarios que se han organizado. Hoy la comunidad del CESDER cuenta con el banco comunitario en el que van trabajando la idea de ahorro y proyección, tienda de abasto comunitario, donde los pobladores pueden adquirir productos a costos accesibles.

Estas cuatro experiencias pedagógicas significativas poseen una estructura bien definida y han perdurado durante muchos años, aportando a las comunidades cambio de paradigmas, mediante acciones pedagógicas, contextualización de contenidos curriculares, organización y sostenibilidad, y una concepción clara sobre lo que debe ser la educación en el entorno rural. Han fortalecido en los jóvenes la construcción de saberes, a través de acciones dialógicas y de autorreflexión que respondan a las diversas necesidades y dificultades, desde su propia realidad y la de su familia y que asuman posiciones de liderazgo.

Aportes a la calidad educativa desde una perspectiva rural

Construcción colectiva e identidad cultural en el currículo

La construcción del currículo para estas experiencias de educación rural, está determinada por los factores y circunstancias que han sucedido o suceden en el entorno, por lo que este proceso se realiza a través de mecanismos de participación, los cuales comprenden docentes o tutores, padres de familia, comunidad y organizaciones no gubernamentales. Con la idea de una formación en lo académico, lo humano y lo práctico, la propuesta curricular se fundamenta en educar desde y para la comunidad. Los fines formativos, se expresan en los contenidos, en los conocimientos, los valores, las habilidades, las competencias, los fundamentos pedagógicos y el sentido educativo de estas experiencias.

En la construcción del currículo se identifican componentes adaptados a las necesidades comunitarias con el claro objetivo de desarrollar en los jóvenes las habilidades para que las nuevas generaciones encuentren en el campo una opción de vida. Estos anhelos son posibles desde un Currículo participativo y contextualizado, Prácticas educativas y estrategias metodológicas contextualizadas, Proyectos Productivos y Saberes pedagógicos, Transformación de prácticas culturales en los entornos familiar y comunitario, Realidades y prácticas en función de la calidad educativa.

Currículo participativo y contextualizado

Este currículo representa el sentir de las comunidades. En él se aportan ideas de construcción estudiantes, docentes, directivos y padres de familia, para garantizar un trabajo que responda a situaciones como: necesidades y proyectos de vida de los educandos, de la comunidad local, regional y nacional. En la experiencia Pedagogía de Alternancia se han adaptado al currículo algunas áreas como agroforestación y cuidado del medio ambiente, de tal manera que los aprendizajes de los estudiantes se orienten a través de procesos dirigidos al desarrollo y fortalecimiento de destrezas investigativas y analíticas, y pensando en el cuidado del entorno y en el desarrollo local y de esta forma, desarrollar en el alumno habilidades conducentes a aprender desde los hilos de la experiencia y las vivencias que le rodean.

Algunos aspectos comparativos del currículo nos permiten integrar elementos comunes alrededor de lo pedagógicamente significativo. Mientras para la experiencia “Escuela y Café” los contenidos curriculares integran la problemática y las expectativas comunitarias, y preparan la formación de la generación de relevo al incorporar temas relacionados con el cultivo y la comercialización del café. Asimismo, en la experiencia del Movimiento de los Trabajadores (MST) la matriz curricular integra la familiarización de los alumnos a la práctica de la investigación social comunitaria, favoreciendo el fortalecimiento de la organización del espacio escolar en su propia organización del asentamiento.

En el “Centro de Estudios Para el Desarrollo Rural” (CESDER) de México, el proyecto curricular plantea una dinámica concienciadora y liberadora de profesionalización. Las áreas de conocimiento propuestas para cursar la licenciatura, buscan que el alumno fortalezca las habilidades que le faciliten adquirir competencias para responder a los problemas reales que afronta una persona del común en el Municipio de Zautla. La experiencia pedagógica se centra en enseñar a trabajar temáticas a partir de la realidad vivida, que contribuya al crecimiento académico y al mejoramiento alimentario de los alumnos y sus familias e integre el aprendizaje de las matemáticas, la geografía y la agroecología. El plan curricular centra sus acciones en la formación de “un profesional con calificación técnica” para formular y gestionar proyectos sociales y productivos para el desarrollo a escala comunitaria y grupal, que logre en su accionar subsanar las carencias materiales de las familias, así como la conservación de los derechos y la consecución de proyectos que mejoren el ingreso familiar, asegurando mejores condiciones de alimentación, nutrición, salud, vivienda y servicios públicos de las comunidades de la región.

La propuesta curricular de las cuatro experiencias es asumida como un proceso de construcción social, en cuyas acciones los estudiantes desarrollan las competencias, a través de estrategias pedagógicas dinámicas. Además, tiene en cuenta todos los actores de la comunidad educativa – sus alcances benefician a cada uno de sus miembros, debido a que el currículo ha sido ha sido concertado y proyectado atendiendo las necesidades y la situación del entorno educativo. Estudiantes, docentes, directivos y padres de familia, aportan a su composición para garantizar un trabajo que responda a situaciones como: necesidades y proyectos de vida de los educandos, de la comunidad local, de la región y del país.

La malla curricular o planes de estudio, integran la escuela con la vida de los estudiantes en las fincas y con sus familias, con la idea de hacer un trabajo mancomunado, para que los jóvenes tomen conciencia de arraigo, compromiso con su comunidad con la región y a la vez se preparen para desempeñarse como personas exitosas en la vida. El trabajo académico, promueve el pensamiento crítico y el desarrollo de las competencias ciudadanas, básicas y laborales, con parámetros de flexibilidad.

En las cuatro experiencias, la interdisciplinariedad facilita la adquisición de los conocimientos y el contacto con la realidad comunitaria campesina, los proyectos productivos pedagógicos en los que los estudiantes establecen relaciones entre el conocimiento escolar, la vida cotidiana y si, es posible, el mundo productivo. Es un medio para optimizar el trabajo cooperativo de la comunidad educativa y demás organismos requeridos en el funcionamiento de la experiencia, además de fortalecer el desarrollo de habilidades, destrezas y valores, en un escenario comunitario, en el cual, se encuentran situaciones que deben sortear de manera autónoma y colaborativa, los aprendizajes se convierten en significativos, con la viabilidad de desarrollar proyectos pertinentes y de acuerdo con las demandas de las comunidades.

Evaluación como Proceso Colectivo de Enseñanza

El proceso evaluativo es muy importante y se deriva de los fundamentos de la educación popular, a partir de lo cual, éste sirve como herramienta para optimizar el proceso educativo, en cuyos resultados se espera evidenciar las “transformaciones personales” (Congreso Fe y alegría, 2013). Una situación particular se identifica en estas experiencias es: comprender la importancia que tienen los saberes y conocimientos del entorno de vida, el reconocimiento de las experiencias individuales y colectivas, la identidad cultural y la proyección de vida.

El uso de estrategias para fomentar el desarrollo del pensamiento crítico en estas experiencias pedagógicas es el insumo para la travesía de formación, donde la evaluación es un componente para aprender y mejorar. Se evalúan los métodos inherentes a los procesos de desarrollo y formación, como son: la participación en actividades pedagógicas, tareas domésticas y productivas; las habilidades del alumno para integrar la teoría y la práctica en las diferentes funciones asignadas en el desarrollo de los proyectos individuales o comunitarios, cuya pretensión es asegurar aprendizajes de calidad en sus alumnos, generando autoconfianza y fomentando el trabajo en equipo. En la Pedagogía del “Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra”, la educación se percibe como un proceso constante que ocurre en forma dinámica en la relación de la gente con la realidad, sus capacidades o metas establecidas, por lo que con la evaluación se verifican los logros en cada etapa.

Proyecto de vida y compromiso social

Trabajar en un proyecto de vida, es una misión personal, en la que cada uno proyecta unas metas, bien sea a corto, mediano y largo plazo, basado en la realidad con el propósito de mejorar la calidad de vida, conlleva por consiguiente a los siguientes interrogantes: ¿Quién soy?, ¿qué clase de persona quiero ser?, y ¿cómo lo puedo lograr? En cierto modo, es un comportamiento natural e inherente al ser humano, Frankl (1996) así lo manifiesta: “Toda persona tiene una vocación o misión específica en la vida, la tarea de cada persona es única, así como la oportunidad específica de realizarla” (p.196).

Los procesos académicos para los niños y jóvenes son orientados con una mirada integral, en la que se involucran actitudes emprendedoras, para lo cual se desarrollan estrategias y actividades que ofrecen herramientas orientadas al mejoramiento personal y a la transformación del entorno social circundante. Se puede reconocer la relación que hay entre los saberes y la proyección de los estudiantes de estas experiencias, puesto que las dinámicas de las mismas generan espacios y elementos en los que cada uno es reconocido como ser humano. Su integración y participación en los entornos comunitarios fortalecen las relaciones interpersonales y la formación de su personalidad.

En la experiencia significativa “Escuela y Café”, el proyecto de vida de los alumnos es fundamental en el proceso, por lo que desde las acciones pedagógicas se promueven sus derechos y los motiva a tomar conciencia de la educación como una oportunidad de formación para la vida. Desde la Experiencia del “Centro de Educación para el Desarrollo Rural” CESDER, El proyecto de vida de los alumnos se va direccionando y enriqueciendo de posibilidades, debido a que deben partir de sus propias necesidades y proyectarse como personas, como familia y como comunidad.

Para la experiencia de la pedagogía de Alternancia, los conocimientos que van adquiriendo son presentados como una oportunidad para que los jóvenes se formen con un proyecto claro sobre lo que será su proyecto de vida y su posibilidad de desarrollo en el medio en el cual viven.

El Proyecto de vida para los integrantes de la experiencia del Movimiento de los Trabajadores Rurales sin Tierra, MST la formación tiene dos fundamentos el trabajo y la militancia, con el propósito de conocer la realidad y transformarla; según desde los conocimientos, las actitudes, y las acciones, las personas adquieren la capacidad de reflexionar, comprender y actuar sobre su medio, transformando y construyendo las condiciones necesarias para la vida, (Vasconcelos, M. 2001).

La concepción y gestión de un proyecto va creciendo a medida que se fortalece la personalidad, existe la posibilidad de tomar riesgo, buscar en los problemas las oportunidades para emprender ideas, consolidar hábitos y costumbres relacionados con el aprovechamiento de los recursos del medio y la construcción del sentido de pertenencia. La formación del pensamiento emprenderista recoge los frutos de la educación impartida en cada una de las experiencias y por esta razón se han dado a conocer y han perdurado en el tiempo, puesto que exalumnos y comunidades muestran los beneficios y cambios en sus comportamientos y en las mismas dinámicas registradas en el entorno comunitario.

Democracia y participación como marco de liderazgo escolar

Los currículos construidos en estas experiencias, promueven relaciones horizontales y democráticas de análisis de condiciones y procesos, en los que procuran oportunidades de progreso y que integren las diferentes capacidades de los estudiantes. Al interior de cada una de las experiencias tienen lugar eventos en los que es evidente la toma de decisiones, instancias en las que la comunidad participa democráticamente, integrando la escuela con el medio.

Uno de los principios de estas experiencias en la formación es la democracia, fundamentada en el derecho a elegir y ser elegidos y representar a su comunidad; el fortalecimiento del liderazgo, en razón a esta proyección, los formadores buscan fortalecer las habilidades y los valores de los estudiantes, ejercicio en el cual se deben evidenciar los conocimientos académicos y el crecimiento personal. La participación democrática impulsa a los estudiantes a participar en la escuela y en la comunidad, en tareas de autoformación, ejercicio de sus derechos y cumplimiento de sus deberes, en distintas situaciones en las que tengan oportunidad de demostrar sus capacidades y desarrollarlas.

Por otro lado, la flexibilidad de los currículos, además de facilitar el trabajo con la comunidad, incorpora elementos reflexivos que ayuden a identificar estereotipos en el proceso educativo, lo cual es considerado como un evento de continua formación y reflexión, donde el estudiante se proyecte como líder en el desarrollo de su región. Descubra que la falta de recursos no siempre es la causa de la pobreza, sino la falta de conocimientos técnicos en la implementación de cualquier proyecto.

Para la experiencia de CESDER existen diferentes mecanismos de acompañamiento y participación, a través de los cuales se articulándolos saberes técnicos y las voluntades grupales, organizados metodológicamente en tres momentos; “promoción, participación y autogestión” (Guadalupe, M., 2008, p.71). El uso de estrategias innovadoras, democráticas y participativas, busca integrar la escuela con el medio, creando un clima favorable de relaciones en el ámbito escolar e implicarse en los temas relacionados con el medio.

La participación democrática de las comunidades del MST en Brasil, ha conminado a la construcción de un currículo, cuya aplicabilidad y recursos integren diversos elementos a la formación de los estudiantes; la lucha social, la organización colectiva, la tierra, el trabajo, la producción y la cultura. En la experiencia de la pedagogía de Alternancia a medida que los estudiantes van avanzando en los niveles, van fortaleciendo los conocimientos y se van proyectando hacia el liderazgo.

Para la experiencia de “Escuela y Café” la figura del gobierno escolar es un elemento base donde se reafirman los conceptos democráticos de participación, liderazgo, responsabilidad, partiendo de la experiencia de elegir y ser elegido, en una organización de estudiantes y para estudiantes. Este elemento es columna vertebral, puesto que involucra a los estudiantes en los procesos administrativos de la Institución, promueve los derechos y hace que los estudiantes tomen conciencia de la educación como una oportunidad de formación para la vida

Es importante señalar cómo los procesos participativos están directamente relacionados con el sentido de pertenencia que estudiantes, padres de familia y comunidad en general sientan por la escuela y cómo estas acciones empoderan las comunidades, donde las ganadoras son ellas mismas.

Prácticas educativas y estrategias metodológicas contextualizadas

Las estrategias metodológicas, entendidas como los principios, criterios y procedimientos que configuran el actuar del docente; conjunto de orientaciones y criterios pedagógicos desde los cuales se desarrollan las prácticas educativas específicas (Torres, 2012). Desde esta perspectiva se identifican en las experiencias pedagógicas significativas, los principios pedagógicos, las características de la población, la región y la modalidad o especialidad formativa, fundamentos a partir de los cuales se construye el conocimiento mediante la combinación teórica y práctica, a partir de las vivencias, las necesidades comunitarias, sin desconocer las particularidades del medio.

Los modelos pedagógicos de los casos estudiados están diseñados para fortalecer en los estudiantes las habilidades específicas, útiles para la vida; desde su cultura, facilitando la continuación de sus labores agropecuarias, mientras reciben conocimientos académicos, de tal manera que el quehacer diario y el aprendizaje sean considerados una oportunidad de mejoramiento. En razón a esto, el desarrollo académico es de carácter flexible, como oportunidad para niños y jóvenes rurales que se encuentran ubicados geográficamente en zonas dispersas y no pueden asistir con regularidad a las aulas de clase, por atender las labores del campo.

El docente o tutor, cuenta con un repertorio de conocimientos y formación en estrategias pedagógicas, requisito en la orientación y el desarrollo de temas, para propiciar un ejercicio pedagógico de forma dinámica y creativa. Los avances tecnológicos y los medios de comunicación a disposición, facilitan herramientas a los docentes para planear estrategias de enseñanza motivadoras, los estudiantes tienen la oportunidad de realizar tareas investigativas, actualizar conocimientos y formar parte de comunidades educativas, desde su territorio.

En “Escuela y Café”, se desarrolla un modelo escolarizado de educación formal, integra de manera sistémica estrategias curriculares comunitarias de capacitación, y acompañamiento formativo a los estudiantes, para garantizar el acceso y la permanencia en el aula de clase. Mediante un ambiente de aprendizaje activo, la metodología Escuela Nueva, ofrece espacios de formación de los alumnos a través de procesos participativos como el gobierno escolar, los rincones de aprendizaje, biblioteca escolar y las actividades vinculadas con los problemas del entorno educativo; en un ambiente escolar con característica de flexibilidad e inclusión.

El modelo educativo de la experiencia de la Pedagogía de Alternancia constituye una integración de los elementos pedagógicos y éticos que fundamentan la formación de los estudiantes y un aprendizaje por medio de un proceso educativo integral a través de una alianza estratégica entre la empresa y la academia, que les posibilita aprender por medio de la práctica. Centra las acciones en la inclusión y reconocimiento de las formas de vida de las familias campesinas y de su economía agrícola, con un enfoque agroecológico, además pone de relieve el pensamiento reflexivo y busca que los estudiantes adquieran una conciencia crítica de su realidad,

La pedagogía del MST hace referencia a la forma como se vienen formando los alumnos: los enfrentamientos, las conquistas, las derrotas y las luchas se convierten en elemento significativo de aprendizaje; defiende que el método de conocimiento debe ir de la práctica a la teoría y de ésta nuevamente a la práctica. Nadie educa a nadie, ni se educa solo, las personas se educan entre sí, en su organización colectiva.

Se encuentra, entonces, total correspondencia de los estudiantes, quienes no sólo se identifican con la metodología, aprenden de múltiples interacciones solidarias con los demás, lo cual les permite ver otras opciones y posibilidades de encontrar inserción social y laboral en su comunidad y en su región, a pesar de las transformaciones y la influencia de ideas del mundo globalizado, les hace reflexionar, individual y colectivamente, acerca de la riqueza que posee el campo.

En el CESDER, direcciona los procesos educativos a través de un modelo propio que consiste en la producción de conocimiento a través de temas generadores en el desarrollo de la experiencia, cuyos principios metodológicos adquieren una condición de flexibilidad en la integración de la planeación, gestión y administración, en tres espacios: la unidad de producción, la comunidad y la región. Esta metodología basada en propuestas educativas y soluciones a problemas de desarrollo local, la práctica supone la articulación de saberes técnicos y voluntades de los participantes, en las que cada grupo asume responsabilidades, siguiendo los intereses y necesidades, creando espacios autónomos, de autogestión y de participación solidaria.

Proyectos Productivos y Saberes pedagógicos

Existen diferentes concepciones en torno a este tema, la concepción que se acerca más a la concepción de la realidad señala diferentes estrategias de enseñar entre ellas, los Proyectos Productivos Pedagógicos estrategias educativas que ofrecen a los estudiantes, docentes y centros educativos oportunidades para articular la dinámica escolar con la de la comunidad, considerando el emprendimiento y el aprovechamiento de los recursos existentes en el entorno como una base para el aprendizaje y el desarrollo, (MEN, 2012). En estas experiencias se constituyen en el puente entre el proceso educativo y la realidad de los estudiantes, mediante la discusión de las problemáticas que rodean el entorno, los aprendizajes emergentes desde las experiencias vividas, se convierten en un proceso de resignificación de lo cotidiano, en el que pequeños y grandes construyen sueños.

El quehacer pedagógico del docente

Elementos como el diálogo, la tolerancia y el respeto, son fundamentales en la búsqueda de espacios para generar una reflexión sobre las necesidades y prioridades de la comunidad. El trabajo interdisciplinar de los docentes ha permitido la orientación y adaptación de contenidos, de tal manera que se relacionen: el conocimiento escolar, la vida cotidiana y en algunas oportunidades el mundo productivo, ejes indispensables de acuerdo con los requerimientos comunitarios.

El quehacer de los estudiantes

Esta ha sido la oportunidad para fortalecer el desarrollo de habilidades, destrezas y valores, en un escenario comunitario, en el cual, se encuentran situaciones que los jóvenes deben sortear de manera autónoma y colaborativa, traducido en adquisición de aprendizajes significativos. El aprendizaje logrado no concierne solamente saberes específicos de asignatura, sino que involucra elementos que ayudan a ser reflexivos y constructores de juicios de valor sobre sus deberes y principios como miembros de una sociedad.

Acción Educativa en las comunidades

Estas han experimentado un puente entre el proceso educativo y sus realidades, viabilizando proyectos pertinentes y de acuerdo con las demandas que éstas requieren. En la experiencia de “Escuela y Café”, el trabajo interdisciplinar se realiza a través de un proyecto desarrollado en la Institución Educativa, denominado proyecto dirigido alterno en cada una de sus fincas o las de sus familias, un proyecto supervisado, (visita programada al lugar). En la experiencia de formación por Alternancia, la formación interdisciplinar de niños y jóvenes, se realiza a partir de los proyectos que estudiantes y comunidad desarrollan en casa.

Una de las matrices pedagógicas para la formación de los miembros de este movimiento MST, (es la pedagogía de la tierra, se educan en su relación con la tierra, el trabajo y la producción; alrededor lucha, propenden por el mejoramiento de sus condiciones de vida a través de proyectos comunitarios). En este movimiento no solo proyectos agroecológicos se trabajan en forma interdisciplinar, también se integran actividades del campamento, en el quehacer educativo.

En el centro de Formación profesional de Jóvenes Rurales (CESDER), vincula a las comunidades a través de los proyectos formulados por los estudiantes, como requisito en su formación y práctica profesional, las prácticas académicas se realizan en torno a los proyectos para el logro de una vida digna individual, familiar y en comunidad.

De la multidisciplinariedad a la transdisciplinariedad

Lo multidisciplinario se identifica con el proceso de formación en el punto de encuentro entre el proyecto pedagógico y el productivo. La multidisciplinariedad está relacionada con la realización de aportes a un proyecto a partir de diferentes disciplinas, desde las cuales se hace un trabajo interdisciplinario, en el que cada disciplina aporta desde diferentes enfoques a la construcción de un mismo objetivo (una problemática determinada en los proyectos). La interdisciplinariedad por su parte, es una herramienta muy importante para facilitar en los estudiantes una mejor comprensión de una situación (problema o temática), desde diferentes ópticas, a partir de las cuales ellos deben relacionar o conectar los saberes. Esta es una forma de hacer que los estudiantes le encuentren la utilidad a lo aprendido, amplíen sus conocimientos y se generen procesos reflexivos, tanto en los estudiantes, como en los docentes.

Al darle importancia a los saberes subestimados, las formas de aprender, las maneras de concebir el conocimiento, transmisión de experiencias culturales, la transdisciplinariedad representa una nueva visión más amplia del entorno y la realidad circundante, porque se identifica con el diálogo de saberes, las creencias, las ideologías, que hacen parte de las representaciones culturales de las comunidades y que contribuyen a la construcción de una pedagogía transformadora.

En las experiencias pedagógicas significativas, el tiempo y los contenidos tienen una relación muy importante con la permanencia de los estudiantes en el aula, por esta razón el abordaje disciplinar del proceso educativo contempla acciones didáctico-metodológicas que favorecen el trabajo cooperativo y colaborativo para optimizar el aprendizaje de los estudiantes. Cada experiencia asegura este trabajo mediante espacios de concertación entre la comunidad educativa, agendado cronológicamente durante el año escolar.

En términos generales, en las cuatro experiencias, los proyectos productivos pedagógicos crean nuevos ambientes dinámicos para el aprendizaje de los estudiantes, además estimulan el contacto permanente con la realidad comunitaria campesina, cumplen una función muy importante en los procesos de aprendizaje, puesto que obligan a todos los actores a cumplir con las tareas asignadas. La alianza con otras instituciones ha sido decisiva en la incorporación de ideas emprenderistas de las comunidades y el vínculo entre los sectores educativo y productivo, determinantes en las condiciones competitivas, aportantes al desarrollo comunitario.

Transformación de prácticas culturales en los entornos familiar y comunitario

Las prácticas culturales, entendidas como el resultado de una dinámica social, específica que responde a las necesidades colectivas, donde la cultura es tomada como algo objetivo y subjetivo, que se integra y expresa a través de un proceso de creación y transmisión social, (Rizo, G.2004). Las cuatro experiencias pedagógicas significativas han sido relevantes en las comunidades porque en ellas confluyen todos los actores sociales y la misma razón de ser de las experiencias, constituye una forma aprendizaje horizontal; docente, estudiantes y comunidad en general.

Las prácticas dialógicas permanentes entre los saberes culturales y los conocimientos técnicos, cobran sentido, el modo de vida comunitario y los propósitos de la escuela, al propiciar en los niños y jóvenes ser protagonistas de su propio aprendizaje, en medio de la cultura local, regional, nacional y global. Las acciones se han enfocado en interpretar los entornos con estrategias innovadoras, democráticas y participativas, entre la escuela y el medio, con apropiación de temas relacionados con la optimización de los recursos, la formación y el desarrollo de pequeños y medianos proyectos agrícolas.

La puesta en práctica de procedimientos técnicos en las labores agrícolas fortalece una conciencia ambientalista como responsabilidad de todos, sus imaginarios, discursos, valores, hábitos y formas de hacer las cosas, de estudiantes, padres de familia y comunidad en general, son testimonios que confirman las dinámicas en el proceso educativo incluyente, orientados el mejoramiento de la calidad de vida de las familias y a la reconstrucción del tejido social.

En la experiencia de “Escuela y Café”, involucra a los estudiantes en los procesos administrativos y democráticos de la Institución, a través del gobierno escolar, estamento desde el cual se promueven los derechos de los estudiantes, a la vez que se hace énfasis en la toma de conciencia de la educación como una oportunidad de formación para la vida. En proyecto educativo de la experiencia de Pedagogía de Alternancia, busca empoderar a las familias con procesos de formación integral y desarrollo humano, con enfoque de equidad de género. Para las comunidades de esta experiencia, hacer parte en forma directa o indirecta, ha sido un reconocimiento muy importante, porque han vuelto a creer en nuevas oportunidades y han visto mejoramiento, en sus familias (económicos y comportamentales), los jóvenes se han convertido en pequeños empresarios, generando empleo y autoempleo, cambiando patrones de comportamiento y convivencia.

El Centro de Estudios para el Desarrollo Rural CESDER, además de propender el liderazgo de los estudiantes y su crecimiento profesional, apoya el desarrollo de proyectos comunitarios. En la pedagogía del MST, las iniciativas y prácticas pedagógicas fortalecen el liderazgo de los estudiantes propician condiciones de mejoramiento con proyectos familiares y comunitarios.

Finalmente, los testimonios de las comunidades dan cuenta del trabajo de estas experiencias pedagógicas significativas, reconocen los conocimientos adquiridos en la escuela, principalmente el fortalecimiento de la autoestima, fundamentos en los cuales se apoyaron para liderar proyectos en beneficio de sus familias y de la región.

Realidades y prácticas en función de la calidad educativa

Calidad de Educación Rural
Fuente: Elaboración propia



En los tres países analizados se conjugan diferentes posturas y políticas frente al tema de la calidad educativa. Estudios y reflexiones respecto al tema, han arrojado importantes implicaciones asociadas al concepto de calidad educativa; la calidad educativa hacia afuera, en lo concerniente a los objetivos de la educación, los beneficiarios, y la institución educativa, desde el reconocimiento de los problemas, la calidad del plantel en su contexto, en el proceso y en todos los que participan en él (Schmelkes, 1994).

En el entorno rural, tema de la calidad educativa se transforma en varios factores que inciden y se deben articular como: la formación docente, los programas curriculares, la mejora de las condiciones de enseñanza y aprendizaje, mayor compromiso de los entes gubernamentales con las necesidades de formación de sus habitantes, factores y elementos que hacen posible los procesos de inclusión educativa. Las prácticas educativas innovadoras en el entorno rural, han desencadenado cambios en el pensamiento y el comportamiento cotidiano comunitario e incorporando saberes, sin perder de vista los cambios y demandas de los requerimientos de la modernidad.

La misión de la escuela al atender las necesidades reales de la comunidad, mejorar las condiciones de vida de sus miembros y lograr espacios fraternos de convivencia, mediante la formación de ciudadanos autónomos, gestores de iniciativas y tomadores de decisiones, parte de la compenetración con la realidad circundante. Sin embargo, en los escenarios escolares, la calidad se da en actos de transformación, inclusión, participación democrática y acciones equitativas entre quienes habitan un territorio.

Según el sentir de las comunidades del Centro de Estudios Para el Desarrollo Rural, tener calidad educativa se asocia al resultado final; ser sujeto social, desde una perspectiva foucoultniana, en la cual se “concertan las reglas y se apropian en la ejecución del proyecto. Los líderes promueven la participación comunitaria, animan, coordinan, acompañan, se auto valoran, reflexionan e identifican elementos que ayudan a mejorar su calidad de vida” (Huerta, Serrano & Comunidad. p.186).

La calidad educativa para la experiencia “Escuela y Café” se relaciona con tener la oportunidad de atender las necesidades reales de la comunidad, mejorar las condiciones de vida de sus miembros y lograr espacios fraternos de convivencia. Para los jóvenes de la Pedagogía de Alternancia, la calidad está relacionada con la oportunidad o alternativa de vida que surgen en medio de los desafíos y las condiciones sociales de las regiones, generar una economía autosostenible, en algunos casos convertirse en pequeños empresarios, generar empleo y autoempleo, cambiar patrones de comportamiento y convivencia.

La calidad educativa para MST trasciende las fronteras de la política nacional de calidad educativa, intentando responder a los requerimientos de las comunidades campesinas, cuyo futuro es trazado en las labores agrícolas, desde una formación humana a largo plazo, esperan que posibilite a los jóvenes gozar de una sociedad más justa, democrática e inclusiva, que pueda cuidar y gozar de los beneficios que ofrece la tierra (Educacao no MST: 2017).

Teniendo en cuenta los territorios donde se han desarrollado estas experiencias, se puede afirmar que han sido parte de la construcción del tejido social (se da en situaciones de emergencia, donde la victimización se ha convertido en un mecanismo de control de la población civil). Una tarea sobresaliente en estas experiencias ha sido desarrollar planes de acción y prevención; comprender los mecanismos y acciones de apoyo mutuo de la gente en las situaciones de emergencia; tener una comprensión global de la acción humanitaria, teniendo en cuenta las exigencias físicas, psicológicas y sociales de la población.

En las cuatro experiencias pedagógicas significativas el concepto de la calidad trasciende lo escolar y se instala en otros escenarios comunitarios y vitales para el desarrollo local; las comunidades parten de situaciones concretas en el entorno donde se desarrollan y la práctica intencionada de transformación de la realidad es notable.

Conclusiones

Los problemas de pobreza y desigualdad en los países de América Latina, conlleva a preguntarse sobre la efectividad de las políticas que se han aplicado en los diferentes gobiernos, para atender a la población más vulnerable, entre ellas la rural. Uno de los problemas identificados en este sector es el desconocimiento de los verdaderos problemas que padecen las comunidades, entre ellos el acceso a la educación, que sigue siendo un problema de fondo.

Existe educación en lo rural, pero no educación de acuerdo con las expectativas de las comunidades rurales, las metodologías flexibles y los programas para llegar a las regiones apartadas no alcanzan a atraer a los excluidos del sistema. Es conveniente recordar que hace más de medio siglo se viene cuestionando la pertinencia de los planes curriculares que se imparten en la zona rural, puesto que éstos han sido una adaptación del currículo urbano, aunque desde algunos enfoques pedagógicos se presentaron ideas sobre la posibilidad de tener una educación contextualizada, sólo algunas comunidades persistieron en ello.

El trabajo educativo de estas experiencias pedagógicas significativas, ha impactado las comunidades por el grado de identidad con el entorno comunitario, a partir del análisis reflexivo de las necesidades y la construcción colectiva de propuestas y acciones, propiciando la convivencia, el trabajo comunitario y el respeto de las diferencias culturales, transformando entornos y mejorando la calidad de vida. Los cuatro casos han asumido una pedagogía emancipadora, mediante pautas de aprendizaje, han fortalecido en los estudiantes las competencias necesarias para emprender ideas, lo cual ha sido un aporte a la reconstrucción de tejido social, al cierre de brechas de inequidad y a resolver en buena medida los problemas de exclusión, históricamente causante de conflictos.

Las comunidades en donde se han desarrollado las experiencias pedagógicas significativas de este estudio, se han beneficiado individual y colectivamente, puesto que además de los conocimientos pueden adquirir productos, que han aprendido a cultivar o a elaborar y han mejorado las condiciones de nutrición y salud familiar, a costos relativamente cómodos. Las estrategias formativas las han sostenido y consolidado, logrando trascender espacios que dan cuenta por sí solos del compromiso comunitario y la perspectiva de vida de las comunidades en el medio rural.

Las dinámicas manifiestas en la pedagogía de la escuela activa y la escuela popular sugieren espacios para aprender, centrados en la naturaleza del estudiante y su identidad. La transversalización de saberes y el fortalecimiento del liderazgo en el aula, en la familia y con la comunidad, sugiere en cada uno de los participantes en la experiencia, el propósito del trabajo colaborativo; y organizativo y su función en el grupo, demostrando que el mejoramiento de la calidad educativa en el entorno rural se puede lograr a partir de acciones colectivas, encaminadas a la construcción de sueños y realidades, desde las necesidades y las problemáticas de la región y de sus comunidades.

A pesar de las particularidades de los estudiantes, propia de la cultura de cada uno de los países analizados; el entorno familiar, las condiciones económicas, los procesos de escolarización, este estudio comparativo, muestra similitudes en elementos importantes en materia de sistemas educativos, política educativa, procesos de evaluación e inclusión. Por esta razón, se concluye que la educación rural en México, Brasil y Colombia merece consideraciones importantes puesto que en el sector rural de los tres países se congrega un número considerable de población, cuyas condiciones de vida podrían mejorar significativamente con una propuesta de currículo, en la cual se evidencien las voluntades compartidas para desarrollar currículos inclusivos y contextualizados. El discurso de la calidad educativa trasciende escenarios diferentes a los escuchados en el común del contexto educativo (resultados de pruebas), debido a que las políticas e instrumentos de los Estados para evaluar la calidad, emiten sus juicios, que se convierten en discursos excluyentes. Desde la perspectiva analizada en esta investigación, se plantea la necesidad de construir propuestas curriculares, políticas y acciones desde las propias comunidades, donde escuela y comunidad sean coequiperas en las soluciones de las diferentes problemáticas que estas afrontan, en las regiones, partiendo del contexto, de la necesidad de crear nuevos saberes y formas de empezar y entender las múltiples realidades, modos de vida y prácticas que hacen parte de la cotidianidad de nuestros pueblos; esto cómo un primer paso para la transformación social.

Ante la situación, de pobreza, deterioro ambiental, violencia y conflicto armado, situación cada vez más compleja que están viviendo muchas comunidades en el territorio rural de América Latina, es posible pensar una política para el sector rural, que cumpla con las expectativas de la población; formación técnica en actividades agrícolas, pecuarias, pesqueras y forestales y agroindustriales que contribuyan a mejorar las condiciones humanas, de trabajo y la calidad de vida de los campesinos. Experiencias pedagógicas significativas como las que se han analizado, son una alternativa para llevar a los escenarios escolares y fortalecer los procesos de autonomía y equidad social.

Finalmente coincidimos en el hecho de que la calidad de la educación se constituye en el eje fundamental para el desarrollo económico, político, social y cultural, así como para la construcción de escenarios de paz y reconciliación; en los cuales, la escuela debe ser promotora de equidad, pensar y vivir la paz desde lo cotidiano, desde la construcción de la memoria histórica, la restitución de tierras y una educación que ayude a reconstruir los sueños de las comunidades. Se necesitan verdaderas políticas e incentivos a largo plazo, donde pequeños y grandes vean el campo como una alternativa en su proyecto de vida.

Referencias

ANEXOS


Anexo 1. Formato de Encuestas a Estudiantes



Anexo 2. Formato de Entrevista a Padres de Familia



Anexo 3. Formato Entrevista a Comunidad



Anexo 4. Entrevista a Estudiantes



Anexo 5. Entrevista a Directivos Docentes