Muuchꢀ xíimbal Caminemos juntos 237
Año 7 / Número 14 / ene-jun 2022 / pp. 231-245
cooperación bajo esquemas especíꢃcos como el 1 + 2 + 3, consis-
tente en “la energía como núcleo (‘1ꢅ), la construcción de infraes-
tructura y el comercio / ꢃnanzas como sus dos alas (‘2ꢅ), y una
mayor cooperación en los tres (‘3ꢅ) campos de alta tecnología de
energía nuclear, satélite espacial y energías renovables” (Lin, 2017,
p. 7). Estas directrices son una estrategia común en la política ex-
terior china, ya que permiten delimitar con claridad el rumbo que
se pretende desarrollar en las relaciones a futuro.
Al contar con marcos muy delimitados de cooperación, la di-
plomacia china puede mantener simultáneamente acuerdos con
rivales regionales, como Arabia Saudita e Irán, y evitar que su cre-
ciente actividad en los países del golfo sea vista como una amenaza
por parte de los Estados Unidos. En otras palabras, la agenda de la
República Popular China en Medio Oriente se rige mayormente
por un criterio de bilateralidad y, sobre todo, por una desvincula-
ción de los temas de seguridad de sus intereses económicos.
Dichas características de las negociaciones de China permi-
ten un alto grado de maniobrabilidad política y comercial en la
región, pues no la comprometen en conꢄictos regionales, contro-
versias o choques con las zonas de inꢄuencia de otras naciones. En
realidad, la desvinculación de agendas supone un beneꢃcio para
los objetivos de la iniciativa pues “permite a China aprovecharse
de los gastos y esfuerzos de Estados Unidos para mantener abier-
tas y seguras las rutas comerciales” (Gater-Smith, 2018, p. 113).
Otro elemento que promueve One Belt, One Road es la au-
topromoción de la República Popular China como la alternativa
al statu quo occidental. Esta labor se desarrolla de múltiples for-
mas, como la mediación en disputas, una mayor participación en
misiones de mantenimiento de la paz y contra la piratería, o con
soporte ꢃnanciero desde el Banco Asiático de Inversión en In-
fraestructura.
La mayoría de las élites políticas y el público en general en me-
na percibe el compromiso de China en la región en términos
predominantemente positivos (Arab Barometer, 2020; Pew Re-
search Center, 2019). En términos generales, lo que es particu-