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M
La Administración Autónoma
del norte y este de Siria
frente a la pandemia
por Covid-19
Resumen
A
cechada por el régimen sirio, así como por un buen número
de actores locales, regionales y extra-regionales que no ven
con buenos ojos el aanzamiento de una forma de organización
anti-sistémica y emancipatoria, la Administración Autónoma del
Norte y Este de Siria (AANES) ha hecho frente a la actual crisis
sanitaria mediante la práctica del comunalismo, el trabajo coope-
rativo y formas de vida que se apartan de la modernidad capita-
lista. Por ello, el artículo tiene como objetivo identicar la serie de
estrategias implementadas por este ejercicio de democracia radi-
cal para hacer frente a la pandemia por Covid-19, al tiempo que
sus detractores redoblan esfuerzos para desarticular su proyecto,
basado en la ideología del Confederalismo Democrático.
Palabras clave
AANES, Covid-19, Confederalismo Democrático,
comunalismo, cooperativas
Fecha de recepción: Fecha de aceptación:
Agosto de 2020 noviembre de 2020
Erika Susana Aguilar Silva *
* Profesora en la FCPyS de la UNAM. Doctoranda en Ciencias Políticas y Sociales
con orientación en Relaciones Internacionales por la misma institución. Correo elec-
trónico: erika.aguilar@politicas.unam.mx
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e Autonomous Administration of North and East Syria
Facing the Covid-19 Pandemic
Key words
NES, Covid-19, Democratic Confederalism, communalism, cooperatives
Final submission: Acceptance:
September 2020 November 2020
Abstract
Stalked by the Syrian regime, as well as by local, regional and extra-re-
gional actors who do not agree with the consolidation of an anti-systemic
and emancipatory form of organization, the Autonomous Administra-
tion of North and East Syria (AANES) has addressed the current health
crisis through the practice of communalism, cooperative work and ways
of life that deviate from capitalist modernity. is article aims to identify
the strategies implemented by this exercise of radical democracy to face
the Covid-19 pandemic, while its detractors keep trying to dismantle its
project, based on the ideology of the Democratic Confederalism.
I Introducción
El pasado mes de abril Ignacio Ramonet dio a conocer el artículo
titulado “La pandemia y el sistema-mundo” en donde señala que,
ante el miedo, el sufrimiento y la perplejidad, la sociedad no sólo
dirigía la mirada hacia la ciencia en busca de una vacuna que ter-
minara con la primera cuarentena global de la historia, sino que
también reclamaba la protección del Estado.
1
No obstante, diver-
sos aparatos estatales alrededor del mundo se beneciaron por
las medidas de seguridad adoptadas ante la contingencia sanita-
ria pues, su acatamiento, sirvió para desmovilizar la ola de mani-
festaciones y protestas sociales que semanas antes inundaron las
calles y plazas principales de ciudades españolas, francesas, argeli-
nas, iraníes, chilenas, etc.
1
Ignacio Ramonet, “La pandemia y el sistema mundo”, La Jornada, Mundo, Ciu-
dad de México, 25 de abril de 2020, disponible en: https://www.jornada.com.mx/
ultimas/mundo/2020/04/25/ante-lo-desconocido-la-pandemia-y-el-sistema-mun-
do-7878.html#sdfootnote1anc.
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Asimismo, se creyó que el SARS-CoV-2 o Covid-19 logra-
ría lo que ninguna organización internacional ha podido conse-
guir hasta el momento, a saber: el cese, al menos momentáneo, de
diversos conictos alrededor del mundo o una “pax coronavíri-
ca, como la denominó el mismo Ramonet. No se tuvo que espe-
rar demasiado para comprobar lo ingenuo de aquel pensamiento,
xime si se recuerda que, por un lado, el neoliberalismo ha con-
vertido a la salud en un privilegio y en una mercancía controla-
da por mecanismos criminales de privatización y, por el otro, que
el conicto y la guerra han sido siempre un gran negocio que no
contempla ningún tipo de respeto por la vida.
ue el Estado no cumpla con la obligación de proteger a su
población
2
no es un femeno nuevo, empero, la situación se
agrava en escenarios como el sirio, donde la escalada de conic-
to a partir de mediados del año 2011
3
ha causado la mayor crisis
humanitaria del mundo en los últimos años y ha dividido el te-
rritorio en torno a los actores que se disputan no sólo el control
geoestratégico sino su nivel de participación en el diseño del futu-
ro político de la República Árabe Siria.
Uno de estos actores o fuerzas sociales es la autonomía de facto
declarada en Rojava
4
a mediados del 2012 y que, en septiembre de
2
Salvo excepciones como la multireferenciada actuación de Jacinda Ardern, Primera
Ministra de Nueva Zelandia o la del gobierno surcoreano encabezado por Moon Jae-in.
En contraste, se ha armado que algunos de los países considerados “más poderosos” del
mundo, poseedores en muchos casos de los más vanguardistas desarrollos cientíco-tec-
nológicos, no han podido detener la expansión del virus; claro ejemplo es la cuestiona-
ble gestión de Donald Trump quien, por esta y otras razones, ha sido señalado como el
peor presidente en la historia de Estados Unidos (incluso por conocidos apologistas del
poderío estadounidense, como el historiador militar Max Boot. Al respecto, véase: Max
Boot, “e worst president. Ever”, e Washington Post, 5 de abril de 2020, https://
www.washingtonpost.com/opinions/2020/04/05/worst-president-ever/.
3
A raíz de las protestas populares que recorrieron el Medio Oriente y norte de Áfri-
ca con la exigencia de una transición política democrática y de la plena satisfacción de
las necesidades básicas, tal como se escuchaba en uno de los eslóganes más utilizados
por los ciudadanos: “¡Pan, libertad, justicia social y dignidad humana!”.
4
Término para designar la parte siria u occidental del Kurdistán (lugar de origen de
este pueblo, que abarca también partes del territorio turco, iraquí e iraní). Rojava es
un área fértil, rica en recursos hídricos y petróleo que comprende los inconexos can-
tones de Afrin, Kobane y Cizire. Aunque sumamente popularizada, se ha insistido
en abandonar esta denominación por resultar excluyente respecto al origen étnico de
otras poblaciones que también habitan la región.
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2018, estableció la Administración Autónoma del norte y este de
Siria (AANES) en las regiones de Cizire, Éufrates, Afrin, Man-
bij, Tabca, Raqqa y Deir-ez-Zor. Dirigida por el partido políti-
co kurdo más relevante (el Partido de Unión Democrática -PYD,
por sus siglas en kurdo-) pero con participación de las diversas co-
munidades étnico-religiosas que habitan en la zona,
5
ha supues-
to un desafío para el gobierno del presidente Bashar al-Asad al
presentarse como una alternativa democratizadora ante el ejerci-
cio autoritario, clientelar y sectario de su familia, en el poder des-
de el año 2000.
Acechada por el régimen, así como por un buen número de ac-
tores locales, regionales y extra-regionales que no ven con buenos
ojos el aanzamiento de una forma de organización calicada co-
mo “anti-sistémica y emancipatoria, la AANES ha hecho fren-
te a la actual crisis sanitaria del mismo modo que ha enfrentado
a un Estado que por décadas ha presentado a sus minorías
6
como
una amenaza a su “identidad nacional: mediante la práctica del
comunalismo, el trabajo cooperativo y formas de vida que se apar-
tan de la modernidad capitalista.
7
Por ello, el artículo tiene como
objetivo identicar la serie de estrategias implementadas por este
ejercicio de democracia radical
8
para hacer frente a la pandemia
5
Árabes, armenios, asirios, caldeos, turcomanos, circasianos, cristianos, musulma-
nes, yazidíes, etc.
6
Como sugiere el politólogo turco Hamit Bozarslan, con “minorías” no aludimos
aquí al sentido demogco del término, sino a las comunidades que han sido reduci-
das a dicha categoría como consecuencia de unas relaciones de dominación y subor-
dinación. Hamit Bozarslan, “e Kurds and Middle Eastern “State of Violence”: the
1980s and 2010s”, Kurdish Studies, 2(1) (2014): 6.
7
ue favorece el proceso de “valorización del valor” pues, según el lósofo mar-
xista Bolívar Echeverría, la modernidad capitalista se traduce en la enajenación de
la soberanía del sujeto social por parte del sujeto automático del capital. Ver: Rodri-
go Hernández González, “Confederalismo Democrático en Rojava: anticapitalis-
mo y modernidad democrática”, Revista de Estudios Internacionales Mediterráneos,
27(2019): 128.
8
Los lósofos políticos Michael Hardt y Antonio Negri la consideran, por deni-
ción, contraria a la “democracia liberal” que desarrolla y reproduce el concepto de
democracia bajo unos límites que perpetúan un statu quo que separa al sujeto so-
cial de todo proceso organizativo-administrativo apoyándose de principios como el
de “representación”; además, sostienen que la democracia radical posee un “poten-
cial transformador” capaz de extenderse a todas las facetas de la sociedad (incluida la
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por Covid-19, al tiempo que sus detractores redoblan esfuerzos
para desarticular su proyecto, basado en la ideología del Confe-
deralismo Democrático.
Para tal efecto, el texto se divide en tres apartados: en el pri-
mero se ofrece un breve contexto del nacimiento, bases ideológi-
cas y funcionamiento de la AANES; posteriormente se ahonda
en el tratamiento que sus comités especializados han dado a la cri-
sis sanitaria por Covid-19. Finalmente, se identican las dicul-
tades que obstaculizan la gestión de la pandemia en medio de un
escenario donde el conicto no sólo no se ha detenido, sino que
se ha agudizado.
II AANES en síntesis
El contexto de las revueltas populares en Siria, caracterizado por
la incertidumbre política, la efervescencia social y la internaciona-
lización del conicto, fue el escenario idóneo para que se pusiera
en marcha un proyecto que si bien fue propuesto por el Partido de
los Trabajadores del Kurdistán (PKK, por sus siglas en kurdo),
9
su
implementación corrió a cargo del PYD, partido surgido en el año
2003 en la región kurda de Siria. A partir del 19 de julio de 2012,
economía). En este sentido, la democracia no debe ser comprendida como un objeti-
vo sino como un principio fundamental o como un “elemento orgánico” de las socie-
dades y no como un “acto esporádico” ni “concedido” por agentes externos a quienes
la crean y recrean colectivamente. A este respecto, se recomiendan: Michael Hardt y
Antonio Negri, Multitude. War and Democracy in the Age of Empire, (New York:
Penguin Press, 2004), 427; Ahmet Hamdi Akkaya y Joost Jongerden, “Reassembling
the Political: e PKK and the project of Radical Democracy”, European Journal of
Turkish Studies, 14(2012): 2-4 y Nathalie Colasanti, Frondizi, Rocco, et al., “Grass-
roots democracy and local government in Northern Syria: the case of democratic
confederalism”, Local Government Studies, 44(6) (2018): 821.
9
Fundado en 1978 al interior de las fronteras turcas. Su principal líder, Abdullah
Öcalan, cumple una cadena perpetua en la prisión de Imrali desde 1999, acusado de
terrorismo y separatismo. Tanto el PKK como el PYD forman parte de la Unión de
Comunidades del Kurdistán, organización creada en el año 2005 para aglutinar a di-
versas organizaciones que ven en el ejercicio de la democracia directa, la vía hacia la
democratización de todo el Medio Oriente. Cabe subrayar que no se trata de organi-
zaciones separatistas, no obstante, al considerar que la gura del Estado-nación legiti-
ma distintas formas de dominación, optan por la descentralización administrativa y
política y, por lo tanto, por el fortalecimiento de sociedades libres de cualesquiera me-
canismos de jerarquización.
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en la región se ejerce una autonomía de facto cuyas directrices es-
tán contenidas en su Contrato Social, emitido en 2014 y modi-
cado en 2016 con la propuesta de un sistema federal democrático
que garantice la participación igualitaria de todos los individuos.
La base ideológica de la AANES es el Confederalismo De-
mocrático, un mecanismo teorizado por Abdullah Öcalan que
fomenta el desarrollo de una “sociedad natural” donde no haya
cabida para el establecimiento de ningún tipo de relación jerár-
quica. Descansa en tres pilares, a saber: una sociedad aunoma y
democrática (comunalismo), la participación de las mujeres en to-
dos los ámbitos de la vida social y ecologismo como fundamento
de una economía sustentable. Para Öcalan:
En contraste con la administración y ejercicio del poder bu-
rocrático y centralizado, el confederalismo propone un tipo de
auto-administración política en la cual todos los grupos de la
sociedad y todas las identidades culturales se expresen en asam-
bleas locales, convenciones y consejos. Ese tipo de democracia
abre un espacio político para todos los estratos sociales y permi-
te que todos que todos los grupos políticos se expresen. De esta
forma, se avanza hacia la integración política de la sociedad co-
mo un todo. La política se vuelve parte de la vida diaria [] El
nivel de libertad de las mujeres determina el nivel de libertad de
su sociedad [] En el autogobierno, es necesaria una alternativa
al sistema ecomico, uno que aumente los recursos de la socie-
dad en vez de explotarlos, de modo que satisfaga la multitud de
necesidades de la sociedad.
10
Para ponerlo en práctica, se ha dado forma a un complejo sis-
tema de toma de decisiones que se articula de abajo hacia arriba,
10
Abdullah Öcalan, Democratic Confederalism, (Londres/Colonia: Transmedia
Publishing Ltd., 2011), http://www.freeocalan.org/wp-content/uploads/2012/09/
Ocalan-Democratic-Confederalism.pdf. (Consultado el 30 de septiembre de 2020),
y Liberating Life: Woman’s Revolution, (Colonia: International Initiative Edition
/Mesopotamian Publishers, 2013), 8, http://www.freeocalan.org/wp-content/
uploads/2014/06/liberating-Lifenal.pdf (Consultado el 30 de septiembre de 2020).
34
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partiendo de la Comuna, pasando por el Vecindario, los Sub-dis-
tritos, el Distrito, el Cantón, la Región, hasta llegar a la AANES.
En cada uno de estos niveles hay comisiones encargadas de te-
mas económicos, de seguridad y defensa, justicia, educación, arte
y cultura, asuntos de la mujer, juventud, reconciliación y justicia,
salubridad, etc.
Asimismo, desde mediados del año 2012, se consideró necesa-
rio contar con un cuerpo de autodefensa que garantizara la segu-
ridad en los territorios autónomos, por lo que fueron creadas las
Unidades de Protección Popular (YPG, por sus siglas en kurdo)
y, un año más tarde, las Unidades de Protección de Mujeres (YPJ,
por sus siglas en kurdo) que propinaron una de las más documen-
tadas derrotas al autodenominado Estado Islámico, organización
criminal que fue expulsado del cantón de Kobane en el año 2015.
Acusando de terrorismo a quienes forman parte del Confede-
ralismo Democrático, del PYD, las YPG y YPJ, el gobierno turco
y sus milicias han perpetrado una serie de ataques y formalizado
la ocupación militar de territorios bajo organización de la AA-
NES, todo ello con el objetivo de frenar el ejemplo de la también
llamada “Revolución de Rojava. A las operaciones “Escudo del
Éufrates” (2016) y “Rama de Olivo” (2018) se sumó “Manantial
de paz” en octubre del año 2019, tras el retiro de parte de las tro-
pas estadounidenses en Siria.
Esta nueva incursión sobre ciudades de Sere Kaniye y Gire Spi,
preveía la creación de una “zona segura” o un “corredor de paz”
que comprendía aproximadamente unos 35 km de profundidad
a lo largo de un tramo de 120 km a lo largo de la frontera turco-si-
ria, dando como resultado la pérdida de localidades fronterizas y
la salida de pobladores y combatientes. Aunque no existen cifras
ociales, se calcula que en los territorios de la AANES conviven
entre cuatro y cinco millones de personas, empero, las operacio-
nes antes referidas han provocado tanto desplazamientos forzo-
sos (de personas provenientes de Afrin, Sere Kaniye, Gire Spi y
Til Temir, regiones ocupadas por el Estado turco) como la llega-
da de comunidades a través de las cuales se refuerzan prácticas de
asimilación cultural (árabe y turca).
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III La ANNES frente a la pandemia por Covid-19
A partir de octubre de 2019, podemos distinguir una división del
territorio sirio en tres partes: la primera (sur y centro) controla-
da por el régimen, la segunda (noroeste) controlada por milicias
con respaldo turco y la tercera (noreste) controlada por la AA-
NES. Esto resulta de suma relevancia puesto que, al inicio de la
pandemia por Covid-19, cada área respondió de manera distinta
e independiente.
Por un lado, el presidente Bashar al-Asad negó durante varios
días la presencia de contagios por Coronavirus, cer fronteras
con Jordania e Iraq y suspendió vuelos comerciales provenientes
de Irán (país del Medio Oriente con mayor número de enfermos);
todo ello al tiempo que organismos como el Observatorio Sirio de
Derechos Humanos documentaba “varios” casos en el país.
11
Fue
hasta el 23 de marzo que Nizar Yazci, Ministro de Sanidad, anun-
ció de manera ocial el primer caso de Covid-19.
12
Desde enton-
ces y hasta nales del mes de septiembre del año 2020, la Ocina
Regional del Mediterráneo Oriental de la Organización Mundial
de la Salud (OMS) había contabilizado 4148 contagios, 1088 re-
cuperaciones y 197 muertes por Coronavirus.
13
ueda por cues-
tionar la conabilidad de estas cifras, sobre todo si se considera
que, tras nueve años de conicto, el sistema de salubridad es inca-
paz (en términos de equipo médico, suministros e infraestructu-
ra) de atender las necesidades de la población, condición que sin
duda ha empeorado a raíz del brote mundial de Covid-19.
14
11
Will Christou y Ammar Hamou, “How will coronavirus aect Syria?”, Syria
direct, 11 de marzo de 2020, https://syriadirect.org/news/how-will-corona-
virus-affect-syria%c2%a0/?fbclid=IwAR0OKp9ukwYVn1ekFviPYMRdu-
cX6s-ETkv6L3LCEyH_Q9yGZUO1UFYKIPLs
12
ANF, “Se conrma el primer caso de Coronavirus en Siria”, ANF News, 23 de
marzo de 2020, https://anfespanol.com/rojava-norte-de-siria/se-conrma-el-pri-
mer-caso-de-coronavirus-en-siria-18709
13
Sitio ocial de World Health Organization, Regional Oce for the Eastern Medi-
terranean, 30 de septiembre de 2020, http://www.emro.who.int/health-topics/coro-
na-virus/index.html
14
El sistema de salubridad sirio es gratuito, no obstante, los hospitales y otros centros
de atención médica han experimentado un declive en sus niveles de calidad desde la
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Mientras tanto, en los territorios bajo control de Hayat Tahrir
al-Sham y otras milicias con respaldo turco, se tomó la decisn
de prohibir la importación de bienes chinos y de cerrar cruces co-
mo al-Bab, en la frontera turco-siria. No obstante, en esta área
hubo un ujo importante de milicias con personal extranjero
(iraníes, afganos, pakistaníes, etc.), situación que supuso un ries-
go para la diseminación del virus.
15
En cuanto a los territorios de la AANES, es pertinente recor-
dar que las precondiciones creadas por el Confederalismo Demo-
crático pueden describirse como “maneras de vivir” que no pasan
por el Estado, sino que dependen de la ayuda mutua para crear
nuevas formas de comunidad, socialidad, organización y determi-
nación de las propias vidas. El politólogo John Holloway se reere
a estas “nuevas formas de hacer” no como un “contra-poder” (lo
que signicaría contestar al Estado y al capitalismo, por ejemplo,
y que podría terminar reproduciendo las relaciones instrumenta-
les del poder de distintas formas) sino como un “anti-poder” que
de manera colectiva y creativa crea, extra-institucionalmente, las
soluciones a los problemas cotidianos de la colectividad.
16
En este sentido, a la pregunta lanzada por Achille Mbembe
respecto a “¿Cómo crear comunidad en tiempos de calamidad?
la AANES (y otras autonomías alrededor del mundo, tales como
la experiencia zapatista del sureste mexicano)
17
ha respondido con
década de 1990, situación utilizada para justicar una serie de reformas neoliberales
que han multiplicado el número de clínicas privadas a las cuales, dicho sea de paso,
tienen acceso un reducido sector de población. Michael Knapp, Anja Flach y Ercan
Ayboga, Revolution in Rojava. Democratic Autonomy and Womens Liberation in
Syrian Kurdistan, En Janet Biehl, (Reino Unido/Estados Unidos: Pluto Press, 2016),
185.
15
Will Christou y Ammar Hamou, “How will coronavirus aect Syria?, Syria
direct, 11 de marzo de 2020, https://syriadirect.org/news/how-will-corona-
virus-affect-syria%c2%a0/?fbclid=IwAR0OKp9ukwYVn1ekFviPYMRdu-
cX6s-ETkv6L3LCEyH_Q9yGZUO1UFYKIPLs.
16
Para ahondar en la noción de “anti-poder”, se recomienda: John Holloway, Cam-
biar el mundo sin tomar el poder. El signicado de la revolución hoy, (Buenos Aires:
Ediciones Herramienta, 2002), 319 y “Doce tesis sobre el anti-poder,” El Viejo Topo,
178(2003): 24-28.
17
El 16 de marzo, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional emitió un comunica-
do anunciando que, ante la “irresponsabilidad y falta de seriedad de los malos gobier-
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trabajo de base, asambleario, comunal y cooperativo, de manera
que se procura cubrir las necesidades de la población; un actuar
totalmente contrario al del sistema capitalista que, en palabras del
mismo Mbembe, “se basa en la distribución desigual de la oportu-
nidad de vivir o morir”.
18
Antes de la pandemia el tema de la salud ya ocupaba un lugar
central en el pensamiento de Öcalan y, por lo tanto, en las estruc-
turas del Confederalismo Democrático. Para Öcalan, “los funda-
mentos, la existencia y la libertad de una sociedad que no puede
proteger la salud por sus propios medios, están amenazados o com-
pletamente perdidos. La dependencia de la salud es un indicador
de dependencia general. Una sociedad que ha resuelto los proble-
mas de salud física y mental está en el camino de la liberación.
19
A partir de este tipo de consideraciones se justica la existencia
de un comité de salud desde la comuna más pequa hasta el nivel
nos y de la clase política en su totalidad” para tomar las medidas necesarias frente a
la amenaza del Coronavirus, decidían decretar alerta roja en sus comunidades, cerrar
los Caracoles y Centros de Resistencia y Rebeldía, seguir recomendaciones y medi-
das de higiene extraordinarias y capacitar a sus promotores de salud, entre otras me-
didas precautorias que marcaron la diferencia respecto a las políticas implementadas
por los gobiernos municipales y estatal: al 4 de julio, sólo se hablaba de seis pacientes
con síntomas de Covid, atendidos en la Clínica Autónoma Las Tazas. Para más de-
talles, se recomiendan: Comité Clandestino Revolucionario Indígena-Comandancia
General del Ejército Zapatista de Liberación Nacional/Subcomandante Insurgente
Moisés, Por Coronavirus el EZLN cierra Caracoles y llama a no abandonar las luchas
actuales, 16 de marzo de 2020, http://enlacezapatista.ezln.org.mx/2020/03/16/
por-coronavirus-el-ezln-cierra-caracoles-y-llama-a-no-abandonar-las-luchas-actua-
les/ y Orsetta Bellani, “Así se cuidan de covid-19 en territorio zapatista”, Pie de página,
4 de julio de 2020, https://piedepagina.mx/asi-se-cuidan-del-covid-19-en-territorio-
zapatista/
18
Recuérdese que, en el año 2003, el teórico camerunés acuñó el término “necro-
política” para señalar los mecanismos utilizados por el Estado para decidir quiénes y
de qué manera vivirán y morirán. Por ejemplo, a propósito de la pandemia, el presi-
dente brasileño Jair Bolsonaro insistió en que la economía no podía detenerse inclu-
so si parte de la población debía morir para garantizar la productividad. Al respecto,
ver: Diogo Bercito, “Achille Mbembe: La pandemia democratiza el poder de matar,
La vorágine. Cultura crítica, 31 de marzo de 2020, https://lavoragine.net/la-pande-
mia-democratiza-poder-de-matar/?fbclid=IwAR1v939ud4B-s8e0jT1OR0Fg-dU-
CrK9BIhJrUlBRDu0mjXYDEGPsoyknXWQ (Consultado el 30 de septiembre de
2020).
19
Citado en s/a, “No hay nada más curativo que la libertad – Şîfa Jin nuevo centro
de salud en Jinwar”, Women Defend Rojava, 5 de abril de 2020, disponible en: ht-
tps://womendefendrojava.net/es/2020/04/05/no-hay-nada-mas-curativo-que-la-li-
bertad-sifa-jin-nuevo-centro-de-salud-en-jinwar/
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regional, así como la celebración de asambleas en las que partici-
pan médicos, farmacéuticos, laboratoristas, personal de hospitales
y organizaciones humanitarias como la Media Luna Roja Kur-
da. Gracias a estos mecanismos, se ha logrado construir clínicas y
hospitales, abrir academias especializadas, organizar cursos y ta-
lleres de primeros auxilios para la población en general, así como
gestionar la llegada de suministros y bancos de sangre con apoyo
de organismos y voluntarios internacionales.
Sin embargo, el desabasto es un problema que ha orillado al
escaso personal médico a realizar intervenciones quirúrgicas sin
anestesia y a dejar sin medicación suciente a decenas de pacien-
tes con enfermedades crónicas que, de poder hacerlo, pagan el tra-
tamiento médico a precio de un dólar (la mitad le corresponde al
médico y la otra mitad se destina a gastos de operación); por otro
lado, y pese al control de precios establecido a los medicamentos,
el mercado negro continúa operando en el territorio. Con segu-
ridad, dicho problema ha servido para catalizar los esfuerzos que
desde el año 2014 se llevan a cabo para rescatar los métodos de la
medicina tradicional y fomentar el uso de plantas curativas en los
tratamientos.
20
Especial mención requiere el más reciente proyecto lanzado
por las organizaciones de mujeres de la AANES. El 4 de marzo
del 2020 se inauguró Şîfa Jin, un centro de salud y curación ubi-
cado dentro de Jinwar,
21
donde no sólo se da atención a mujeres
y niños de la aldea sino de pueblos cercanos, así como a hombres
con alguna urgencia. En este nuevo centro se aplica tanto la me-
dicina moderna o química como la natural: plantas medicinales,
masajes, terapia, ejercicios o cualquier otro recurso en el que las
mujeres tengan conocimientos previos. En el mediano plazo, es-
20
Michael Knapp, Anja Flach y Ercan Ayboga, Revolution in Rojava. Democratic
Autonomy and Women’s Liberation in Syrian Kurdistan, En Janet Biehl, (Reino
Unido/Estados Unidos: Pluto Press, 2016), 187-190.
21
Literalmente “el lugar donde viven las mujeres”. Se trata de una aldea ecológica
conformada por mujeres (y sus hijos) que han experimentado violencia de género en
distintos niveles. Fue inaugurada el 25 de noviembre del 2018, día internacional en
contra de la violencia hacia las mujeres.
39
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peran contar con las condiciones materiales y de seguridad para
montar un laboratorio y adquirir una ambulancia.
Aunque no alcanzó a ver cristalizado todo su esfuerzo, la vo-
luntaria argentina Alina Sánchez sigue siendo un símbolo no sólo
del internacionalismo transfronterizo que converge en los territo-
rios autónomos del norte y este de Siria, sino de la constante refor-
mulación de la salud comunitaria que se aspira consolidar como
elemento esencial (socializado) de un mundo más justo. Estudió
medicina en Cuba, donde se formó en la perspectiva comunitaria
de la medicina popular que más tarde puso en práctica en el nor-
te y este de Siria, donde murió a causa de un accidente en marzo
del año 2018.
Con todo este trabajo como soporte, cuando llegó el momen-
to de tomar medidas precautorias ante el posible brote de Co-
vid-19 en los territorios de la AANES, las estructuras autónomas
implementaron las estrategias que a continuación se enlistan y
que fueron recopiladas gracias a la información proporcionada
por Kurdistán América Latina, Rojava Azadi Madrid, Rojava In-
formation Center, Women Defend Rojava, las agencias de noticias
ANHA y ANF,
22
principalmente:
22
Escribir sobre un suceso al tiempo que éste continúa en marcha nunca ha sido una
labor sencilla. Tratándose del tema que nos ocupa, nos encontramos además con la
serie de obstáculos que supone la persistencia del conicto armado y, por lo tanto, la
imposibilidad de los investigadores de llevar a cabo un trabajo de campo de coadyuve
a contrastar la información que se nos proporciona desde terreno. En este sentido, las
fuentes de información mencionadas ciertamente pueden estar sesgadas o reprodu-
cir una misma narrativa, no obstante, consideramos que la combinación de informa-
ción transmitida por los medios de comunicación formales e informales con aquella
proporcionada por testigos y participantes puede, de hecho, considerarse como una
versión relativamente realista de los acontecimientos. Cabe señalar que informes co-
mo “Syria: Aid restrictions hinder Covid-19 response” de Human Rights Watch han
sido reproducidos por sitios como el mencionado Rojava Information Center, uti-
lizando como informantes a las mismas estructuras autónomas de AANES por ser
los únicos datos con los que se cuenta hasta el momento (disponible en: https://roja-
vainformationcenter.com/2020/05/human-rights-watch-syria-aid-restrictions-hin-
der-covid-19-response/). Adicionalmente, ningún organismo gubernamental sirio u
ocina regional o internacional especializada en materia de salud ha proporcionado
información detallada respecto a la gestión de la pandemia en la AANES, tal como se
mencionará en las páginas siguientes.
40
L A A      S     
C-19 / Erika Susana Aguilar Silva
M
El 19 de marzo se anunció que cuatro días después daría ini-
cio el periodo de cuarentena por Coronavirus.
Se prohibió la entrada de personas provenientes de las áreas
controladas por el régimen y se cerraron cruces fronterizos
(como el de Semalka, con Iraq). En caso de ayuda humani-
taria, el personal encargado de distribuirla debía seguir un
protocolo sanitario que incluía la medición de temperatura.
Todos los viajeros fueron puestos en cuarentena y monito-
reados por personal calicado.
Se cerraron escuelas y universidades; se prohibieron aglo-
meraciones (incluidas las oraciones colectivas) y se cancela-
ron eventos deportivos y culturales (como la celebración del
Nowruz o año nuevo).
Se distribuyeron trípticos informativos sobre las caracterís-
ticas del Covid-19. Asimismo, en radio y televisión se difun-
dieron comunicados y recomendaciones.
Se creó la Ocina de Crisis para contrarrestar el Covid-19 y
se establecieron salas de aislamiento y centros de salud.
Las cooperativas mixtas y de mujeres, además de producir
los textiles y alimentos de costumbre, incursionaron en el
diseño y producción de cubre-bocas, mascarillas (alrededor
de 5 mil diariamente)
23
, guantes y exfoliantes médicos. Este
material de primera necesidad se distribuye de manera gra-
tuita a través de las comunas de cada vecindario. A medida
que avanzó la pandemia, fueron multiplicándose también
los talleres de manufactura.
A través de comisiones de asuntos sociales, se reparte ali-
mento gratuito, artículos de higiene personal, limpieza y
desinfección a los más vulnerables.
El 3 de abril se dio a conocer una prueba para Covid-19 desa-
rrollada por médicos del Comité de Salud. Cuenta con certi-
cación ISO, es capaz de entregar resultados en 35 segundos y
23
s/a, “Las comunas cubren las necesidades de la población en Shehba”, ANF
news, 28 de marzo de 2020, https://anfespanol.com/kurdistan/las-comunas-cu-
bren-las-necesidades-de-la-poblacion-de-shehba-18824?fbclid=IwAR20jzdK9i-
TvOv7WW6QK1LESint_GIA5Lhda9E_3azuO5uK1r-2srKaKyfs
41
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tiene una conabilidad de entre el 80 y el 85%. Por su ecien-
cia, dicha prueba fue ofrecida a instituciones de salud e incluso
algunos países intentaron patentarla, encontrando un férreo re-
chazo por parte de los representantes de la AANES.
24
Los ingenieros Mehmud Mihemed Xer, Mesum Sileman y
Serdar Tahir Selim crearon un prototipo de ventilador médico
que podrá ser usado en hospitales una vez que los especialistas
otorguen su aprobación.
IV Dicultades de la AANES para hacer frente a la pandemia
El hostigamiento de quienes ven con malos ojos el aanzamien-
to de una forma de organización anti-sistémica y emancipatoria
en Siria y el Medio Oriente se ha recrudecido durante la pande-
mia por Covid-19. En términos generales, los actores locales, re-
gionales y extra-regionales a los que hacemos alusn y que están
directamente involucrados en la gestión del conicto sirio son: el
régimen de Bashar al-Asad, el Gobierno Regional del Kurdistán
(Iraq), Turquía y sus proxies, Rusia y Estados Unidos.
Si bien el proyecto político de la AANES carece de reconoci-
miento internacional, el gobierno estadounidense estableció una
alianza táctica con milicias de los territorios autónomos para com-
batir al autodenominado Estado Islámico,
25
de manera que los ca-
nales de comunicación establecidos han dado lugar a la entrega
de “algo de ayuda” a la AANES pero sin concertar ninguna me-
dida concreta con la coalición anti-Estado Islámico que lidera.
26
24
Ayhan Metin, “How does the Covid-19 test kit developed in Rojava work?”, ANF
news, 3 de abril de 2020, https://anfenglishmobile.com/features/how-does-the-co-
vid-19-test-kit-developed-in-rojava-work-42739?fbclid=IwAR0S5KO3r34CM-Kb-
pkOty5A6HcxzGhpTl5WjAJyqBDij8T0Z2Ao42VEjA
25
Nos referimos a las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS). Formadas en octubre del año
2015, se trata de una coalición de 34 organizaciones militares entre las que destacan las
YPG y YPJ. Conviene recordar que en marzo del año 2019 se anunció la derrota del Estado
Islámico, empero, células durmientes de este grupo continúan esparcidas por el territorio.
26
Anya Briy, “Rojava statelessness in a time of pandemic” Open Democracy, 19 de
mayo de 2020, https://www.opendemocracy.net/en/north-africa-west-asia/roja-
va-statelessness-time-pandemic/
42
L A A      S     
C-19 / Erika Susana Aguilar Silva
M
Por su parte, al gobierno ruso
27
se le debe la remoción, des-
de enero del 2020, del cruce de al-Yurubiya (en la frontera con
Iraq) de la lista de cruces de ayuda humanitaria permitidos por
la resolución 2,165 (2014) del Consejo de Seguridad de la Orga-
nización de las Naciones Unidas. A este tipo de complicidades
se suma la actuación de la Organización Mundial de la Salud
(OMS) que en repetidas ocasiones ha declarado su disposición
para prestar asistencia médica y paquetes de pruebas no sólo en
las zonas controladas por el régimen sino en aquellas otras con-
troladas por fuerzas turcas o pro-turcas, al tiempo que guarda
silencio respecto a los territorios de la AANES donde buena
parte del instrumental sanitario ha sido destruido por los con-
tinuos ataques turcos.
Para nales de abril se calculaba un ventilador por cada 100
mil habitantes y una capacidad de atención de 460 casos activos
en hospitales y centros de salud.
28
En este sentido, no es descabe-
llado pensar que “la salud” está siendo utilizada como herramien-
ta política para forzar a los representantes del Confederalismo
Democrático a acercarse a Damasco en busca de asistencia y pre-
sentar este comportamiento como señal de sumisión. Empero, ya
en otros contextos críticos (como en la última operación militar
turca de octubre de 2019), los representantes de la AANES han
actuado estratégicamente ofreciendo un trabajo coordinado si así
es necesario por el bien de la población. Dicho llamamiento no se
ha traducido en un dlogo duradero ni mucho menos en la inclu-
sión de la AANES en las conversaciones del Comité Constitucio-
nal para Siria, celebradas a lo largo de casi nueve años en ciudades
como Viena, Munich, Astana, Riad, El Cairo, Sochi y, reciente-
mente (el 24 de agosto), en Ginebra tras nueve meses de pausa a
causa de la pandemia.
27
Cuyo respaldo, junto con el de Irán, ha sido decisivo para asegurar la permanencia
de Bashar al-Asad en el poder.
28
Rl Zibechi, “Autonomías para enfrentar las pandemias”, La Jornada, Opinión,
Ciudad de México, 24 de abril de 2020, https://www.jornada.com.mx/2020/04/24/
opinion/021a1pol
43
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Otro de los actores locales-regionales al que se debe hacer alu-
sión es el Gobierno Regional del Kurdistán iraquí (GRK)
29
li-
derado por el Partido Democrático del Kurdistán (PDK) de la
inuyente tribu Barzani. La categoría “local-regional” obedece al
hecho de que esta entidad cuasi-estatal auspició la formación del
Consejo Nacional Kurdo en octubre del 2011 en un intento por
aglutinar a los partidos inuenciados por los Barzani y apoyados
por el gobierno turco en Rojava. Su objetivo era impedir que el
PYD se consolidara como una fuerza política en la región, pero el
tiempo constataría que ello sería inevitable.
La complicidad del GRK y el régimen turco puede rastrearse
en distintos frentes y periodos.
30
Sin embargo, en lo concernien-
te al manejo que la AANES hace de la pandemia, debe mencio-
narse que el envío de pruebas de Covid-19 que el GRK realizaba
hacia la regn fue interrumpida, debido a las presiones recibidas
desde Ankara. Entonces, al embargo económico que ya se practi-
caba sobre la AANES se sumó uno humanitario a modo de casti-
go colectivo hacia formas de organización política alternativas al
modelo nacionalista estato-céntrico y capitalista.
29
Entidad federativa autónoma que desde el año 2005 cuenta con el reconocimien-
to del gobierno central iraquí y de la Organización de las Naciones Unidas. El GRK y
el PKK son las dos fuerzas políticas kurdas que actualmente se disputan las fronteras
simbólicas que han construido en torno a sus áreas de inuencia, condición facilitada
por el debilitamiento y la sectarización que domina el escenario iraquí y sirio, exacer-
bados desde la invasión estadounidense del año 2003 y el inicio de las revueltas popu-
lares, respectivamente.
30
Además de que tanto Turquía como el GRK giran en la órbita del gran capital
transnacional, a ambos actores los une el interés de desarticular el “capital político”
del PKK y sus partidos anes (como el PYD de la AANES); por ello, las voces críticas
del GRK y el PDK argumentan que si éste “fuera un partido nacionalista kurdo, co-
mo algunos arman, no participaría en los ataques genocidas de un Estado que quie-
re acabar con la existencia y la libertad de este pueblo […] El PDK cree que, junto a la
República de Turquía, liquidará al PKK y a las organizaciones opositoras y obtendrá
el control total sobre el Kurdistán. Cree que si elimina los obstáculos que tiene en-
frente, dispondrá del Kurdistán como desea mientras mantiene su poder. Tontamen-
te, el PDK nunca piensa que, de hecho, será el objetivo del próximo ataque. Porque
los intereses sucios y a corto plazo han cegado sus ojos, secado su corazón, y parali-
zado su cerebro.” Bercem Jiyare Axpar, “Kurdismo o la máscara del PDK”, en ANF
news, 24 de agosto de 2020, https://anfespanol.com/reportajes/kurdismo-o-la-mas-
cara-del-kdp-22224?fbclid=IwAR2aDdW9LX-V7sWpY_frp8Siez6zvDg4Mmhu-
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De manera más contundente y violenta, desde octubre del
año 2019 el régimen turco ha continuado bloqueando accesos,
atacando comunidades, reforzando prácticas de asimilación cul-
tural, así como desmantelando las estructuras aunomas de los
territorios ocupados. Más grave, dado el actual contexto pandé-
mico, ha resultado el corte del suministro de agua proveniente
del depósito de Allok que da de beber a entre medio y un miln
de personas, incluidas las que se encuentran hacinadas en cárceles
y campamentos de desplazados internos, tales como Washokani,
Aresha, al-Hol (alojado en su mayoría por familias del Estado Is-
lámico), Roj, Mahmud o Serdem sitios donde, además, la tuber-
culosis está en aumento.
Resulta imperativo recordar que, en cualquier circunstan-
cia, cortar el suministro de agua a la población civil constituye
un crimen de guerra, no obstante, las prácticas de “hidro-terro-
rismo” o weaponization of water en Siria han sido exclusivamen-
te atribuidas al Estado Islámico, esto bajo el supuesto de que los
regímenes estatales utilizan con menor frecuencia este tipo estra-
tegias, sancionadas por instrumentos como la “Convención sobre
la prohibicn de usar técnicas de modicación ambiental con -
nes militares u otros nes hostiles” de 1976 o la “Convención de
Ginebra y su Protocolo Adicional II” de 1977 (relacionado con
la protección de víctimas en conictos armados no internaciona-
les), de los que Turquía no es miembro rmante. Como en el caso
de la salud, el uso del agua como herramienta política queda com-
probado al conocer las exigencias que las fuerzas de ocupación
turcas hacen a la AANES respecto a suministrar cantidades ma-
yores de electricidad a cambio del vital líquido.
31
31
Para ahondar en el tema, se recomiendan: Marcus D. King, “e Weaponization of
Water in Syria and Iraq”, e Washington uarterly, 38:4, 2015, pp. 153-169; s/a, “Nor-
te y Este de Siria: sin pruebas de coronavirus, sin agua, sin ayuda de la ONU, Kurdistán
América Latina, 26 de marzo de 2020, http://kurdistanamericalatina.org/norte-y-es-
te-de-siria-sin-pruebas-de-coronavirus-sin-agua-sin-ayuda-de-la-onu/?fbclid=IwAR-
0VO8BrhZQ85iBRLA7jGS_cYjpx1M27SwixuRKZguf2SOQGtttzz6Af014;
omas McClure, “Coronavirus in Rojava: Facing a pandemic without a State”, Novara
media, 4 de mayo de 2020, https://novaramedia.com/2020/05/04/coronavirus-in-roja-
va-facing-a-pandemic-without-a-state/; Human Rights Watch, “Turkey/Syria: We-
aponizing water in global pandemic?”, Human Rights Watch, 31 de marzo de 2020,
45
Muuch’ xíimbal Caminemos juntos
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Reexiones nales
Si se pone en balance la gestión y los obstáculos que la AANES
enfrenta para combatir la pandemia por Covid-19, es compren-
sible que pese a las estrategias implementadas por el comunalis-
mo y cooperativismo, la regn no haya logrado escapar (como
prácticamente ningún lugar del mundo) a la crisis sanitaria que
se convertirá en uno de los acontecimientos más representativos
del presente siglo.
La primera muerte por Covid-19 registrada en la AANES tu-
vo lugar el 2 de abril.
32
Se trataba de un hombre de 53 años que
fue atendido en el Hospital Nacional de Qamishlo y su prueba
enviada a un laboratorio de Damasco sin ningún proceso de faci-
litación por parte del régimen ni de la OMS, de modo que hasta
el 17 de ese mismo mes se supo con seguridad que el nuevo virus
había sido la causa del deceso. Pese a que las medidas de sanidad se
reforzaron desde agosto (al grado de imponer medidas punitivas
ante su incumplimiento), a nales de septiembre el Rojava Infor-
mation Center reportó un total de 1398 casos, 397 recuperacio-
nes y 61 muertes por Covid-19.
33
Como se mencionó al inicio del texto, la actual crisis sanitaria
no implicó una “pax coronavírica” en escenarios como el aquí re-
ferenciado. Por el contrario, fuerzas opositoras locales, regímenes
regionales y sus aliados extra-regionales intensicaron el acoso que
https://www.hrw.org/news/2020/03/31/turkey/syria-weaponizing-water-global-pan-
demic?fbclid=IwAR0VO8BrhZQ85iBRLA7jGS_cYjpx1M27SwixuRKZguf2SO-
QGtttzz6Af014; Beritan Sarya, “AANES enfrenta sola la emergencia del coronavirus”
ANF news, 31 de marzo de 2020, http://kurdistanamericalatina.org/aanes-enfren-
ta-sola-la-emergencia-del-coronavirus/?fbclid=IwAR0VO8BrhZQ85iBRLA7jGS_cY-
jpx1M27SwixuRKZguf2SOQGtttzz6Af014
32
s/a, “Syria’s Kurdish-led northeast conrms rst case of coronavirus”, Reuters, 17
de abril de 2020, https://www.reuters.com/article/us-health-coronavirus-syria-nor-
theast/syrias-northeast-confirms-first-death-from-coronavirus-statement-idUS-
KBN21Z2SX?feedType=RSS&feedName=worldNews&utm_source=feed-
burner&utm_medium=feed&utm_campaign=Feed%3A+Reuters%2Fworld-
News+%28Reuters+World+News%29
33
RIC, “Update: coronavirus in North and East Syria – week ending 27 September”,
Rojava Information Center, 30 de septiembre de 2020, https://rojavainformation-
center.com/2020/09/update-coronavirus-crisis-in-north-and-east-syria-week-en-
ding-27-september/
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ejercen sobre la AANES y la población que hace posible el Con-
federalismo Democrático al interior de dos países que, aunque
proclamados repúblicas, han hecho de sus ejercicios de poder, dos
de los más representativos ejemplos de autoritarismo en Medio
Oriente, la primera persiguiendo el suo neo-otomano (Turquía)
y la segunda el de dar continuidad a la “república hereditaria” man-
tenida a costa del silenciamiento violento de su población (Siria).
La AANES es un experimento democrático que navega a con-
tra-corriente de sus detractores, no obstante, su sobrevivencia po-
lítica depende no sólo de su habilidad para perlarse como una
fuerza política y militar indispensable en los futuros reacomodos
políticos del escenario sirio sino más importante aún, de la obser-
vancia de sus principios ideogicos fundacionales que, como ya
se ha señalado, conciben a la democracia como un elemento con
potencial transformador” y “un carácter subversivo” que se ex-
tiende a todas las facetas de la vida social. En este sentido, socia-
lizar el acceso a la salud (y no privatizarlo) ha sido uno más de
los ejes de actuación del Confederalismo Democrático de la AA-
NES, pese a lo cual no pueden evadirse los obstáculos que enfren-
ta y que han sido brevemente abordados en este escrito.
Así como la dicultad para respirar es uno de los más apabu-
llantes síntomas del Covid-19, la “pandemia del autoritarismo y el
capitalismo” (como la han llamado los simpatizantes del Confe-
deralismo Democrático) pretende asxiar el esperanzador modelo
de la AANES. Ciertamente, parece imposible ver una Siria demo-
crática y federal que garantice los derechos y la dignidad humana
de todos sus habitantes, no obstante y como ya lo dijo Eduardo
Galeano, “la utopía está en el horizonte [y] sirve para caminar.
“No hay nada más curativo que la libertad.
Şîfa Jin, centro de salud y curación de Jinwar.
… la salud es mucho más que la ausencia de enfermedad
y tiene que ver con la capacidad de sentirse con ánimo de despertar,
caminar, reírse, ir a la milpa. Salud es que su corazón esté contento,
que uno se sienta a gusto consigo mismo y los demás”.
Joel Heredia, fundador de Salud y Desarrollo Comunitario.
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