128 La imposibilidad metafísica de la positividad del mal en Francisco Suárez. Un estudio de caso según
las fuentes: Agustín de Hipona, Dionisio Areopagita y Tomás de Aquino / José María Felipe Mendoza
turaleza: el no poder llevar a la perfección las cosas de la propia naturaleza”
(Areopagita, De Div. Nom., PG 3, § 26, 370C).
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Por tal motivo la malicia es en-
tendida como “perversión y corrupción de la sustancia de los entes” (Areopagi-
ta, De Div. Nom., PG 3, § 20, 364C),
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o “debilidad y defecto del bien” (Areopagita,
De Divinis Nom., PG 3, § 30, 372B),
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pues “en verdad lo productor de los males
no son razones y potencias sino la impotencia, debilidad y mezcla asimétrica
de las cosas desemejantes” (Areopagita, De Div. Nom., PG 3, § 31, 372B).
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Según
esta tesis conviene aclarar que “el mal ni siquiera tiene sustancia, sino para-
sustancia al generarse gracias al bien y no por sí mismo” (Areopagita, De Div.
Nom., PG 3, § 31, 372C).
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El mal es entonces privación y defecto y debilidad y asimetría y yerro y falto de ob-
jetivo y falto de belleza y falto de vida y falto de inteligencia e irracional e imperfec-
to y sin cimiento e incausante e indenido e infértil e inerte e inactivo e inordinado
y disímil e ilimitado y oscuro e inesencial y él no es ente alguno de ningún modo en
ninguna parte (Areopagita, De Div. Nom., PG 3, § 32, 373D).
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Las reexiones de Dionisio lejos están de acercarse al pensamiento de Suá-
rez de acuerdo con tres considerandos. (1.) el lenguaje neoplatónico de Dionisio
no coincide con la analítica del aristotelismo barroco suareciano, (2.) el texto
dionisíaco, siendo netamente teológico, inserta el tratamiento del mal según
los tópicos del neoplatonismo cristiano: el mal en los demonios, el mal en el al-
ma humana y el mal en la materia. (3.) únicamente las deducciones sobre los
temas mencionados ponen de maniesto una teología del mal en sí, y que es
lo más próximo a las intenciones de Suárez de entenderla como metafísica del
mal radical. También debe subrayarse que, junto al desplazamiento hacia la fe
cristiana como fundamento del pensar suareciano, la tesis del pitagorismo res-
pecto del mal como principio de los entes –entendida en cualquiera de las va-
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“non est itaque natura mala; sed hoc naturae malum est quod eam impotem reddit explendi ea
quae sunt naturae propia”.
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“malum qua malum nihil conferre ad essentiam aut rerum generationem, sed, quantum in ip-
so est, rerum substantiam tantum depravare atque abolere”.
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“Reliquum est igitur, malum esse debilitatem quamdam defectionemque a bono.”
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“non tamen ecientes sunt malorum rationes ac factultates, sed impotentia, et inrmitas, et
incongrua quaedam permistio rerum dissimilium”.
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“quapropter neque substantia malum nititur, sed substantia simulacro, dum boni et non sui
ipsius gratia geritur”.
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“Malum ergo privatio est, et defectus, et inrmitas, et inconcinnitas, et error, et frustratio
scopi, pulchritudinis, vitae, intellectus, rationis, perfectionis, fundamenti, causae; est inter-
minatum, sterile, iners, imbecillum, confusum, dissimile, innitum, tenebrosum, statu caret,
ipsumque nullo pacto, ac nusquam, et nihil exsistit”.